“El pasado día 8 de marzo, bajo el argumento de una supuesta falsificación de firmas, la empresa TALSA despidió a toda la junta directiva del Sindicato”, informó Herrera.

Esta compañía que exporta su producción mayoritariamente a Europa, es propiedad del exministro de Agricultura, Rafael Quevedo Flores y mantiene una larga historia de antisindicalismo.

En esta oportunidad procedió a despedir a directivos del Sindicato porque la organización denunció las malas condiciones laborales, sobre todo en lo que refiere a la salud y seguridad laboral.

Inmediatamente de notificados los despidos, la empresa comenzó a constituir una nueva organización, pero esta vez con trabajadores afines a los intereses de la compañía.

Para Herrera este tipo de maniobras “son un claro atentado a la libertad sindical. El exministro cree que por sus influencias políticas nos va a doblegar, pero no; ya hemos iniciado una campaña internacional de denuncia contra las prácticas antisindicales de esta empresa y hemos judicializado el caso de los despidos”, declaró.

Según el dirigente, los trabajadores fueron despedidos de manera ilegal, pues estaban amparados por el fuero sindical en el momento que se les notificó la decisión de la gerencia.

“Además –agregó– estos despidos ocurrieron al tiempo en el que las negociaciones deberían haber comenzado para renovar el acuerdo del Convenio Colectivo entre la empresa y el Sindicato”.

El caso de los despidos ya está en la órbita de la justicia laboral de la Segunda Región de Trujillo y tanto la Federación como el Sindicato han iniciado una campaña internacional de denuncia.

“Agradecemos desde ya el apoyo de la Rel-UITA en este proceso de dar visibilidad a los atropellos sistemáticos de TALSA”, finalizó Herrera.