Ante la inminente paralización de la producción y distribución de los productos de Cervecería Nacional en todo el país, Alejandro John, secretario general del Sindicato Industrial de Trabajadores de la Fabricación y comercialización Refrescos, Bebidas, Gaseosas, Cervezas, Licores y Similares (Sitrafcorebgascelis), conversó con La Rel sobre las expectativas que se están generando a nivel nacional.

-Estamos a pocas horas de dos eventos de gran trascendencia: la gran movilización de hoy y el inicio de la huelga a partir de las 6 de la mañana de mañana viernes. ¿Cómo se están preparando?
-Nos mantenemos en contacto permanente con todos los centros de trabajo, donde se están realizando varias actividades de protesta contra la actitud intransigente de la empresa, y en apoyo al derecho a la negociación colectiva que tenemos los trabajadores, de acuerdo a las normas de nuestra legislación laboral.

Estamos simplemente defendiendo nuestros derechos, que están siendo violentados por Cervecería Nacional.

-¿Cómo está el ánimo de los trabajadores, tanto de vuestra organización como del Sindicato de la Industria Cervecera de Panamá (STICP)?
-El estado de ánimo frente a la huelga que arranca mañana es muy positivo. Vale la pena recordar que esta medida de lucha se prolongará hasta tanto la comisión negociadora sindical lo considere oportuno, según vaya desentrañándose la situación.

-¿Cómo está reaccionando la empresa?
-En pocas horas vamos a tener otra sesión de negociación, donde se integrará el señor Pablo Uribe, vicepresidente de Recursos Humanos de la Cervecería Nacional, que es subsidiaria de SABMiller en Panamá.

Vamos a ver si hay un cambio real de actitud, porque esta transnacional está acostumbrada a negociar imponiendo condiciones.

En estos días, por ejemplo, en varios centros de trabajo se les ha prohibido la entrada a los directivos sindicales y se ha mantenido una fuerte presión sobre los trabajadores para que no apoyen la huelga.

Han llegado al absurdo de prohibir la entrada a nuestro secretario de educación, Jonathan Vélez, al centro donde él trabaja.

La empresa tiene hasta las 5.30 de la mañana de este viernes para recapacitar y comenzar a avanzar significativamente en la negociación. Por el contrario, si SABMiller mantiene la misma posición confrontativa no tendremos otra opción que iniciar la huelga.