Presidente de la República de Colombia
Doctor Juan Manuel Santos Calderón
Palacio de Gobierno
P r e s e n t e.-
Ref: Atentado a dirigentes del Sintrainagro
De mi consideración:
Por la presente manifestamos nuestro más profundo repudio e indignación ante un nuevo atentado contra dirigentes sindicales en Colombia.
Ayer 24 de febrero Guillermo Rivera, presidente nacional del Sindicato de Trabajadores de la Industria Agropecuaria (SINTRAINAGRO), y Medardo Cuesta, tesorero de la organización, fueron interceptados por hombres armados que dispararon contra el vehículo en el que se encontraban viajando por el Valle del Cauca.
Afortunadamente, la rápida reacción del custodio asignado permitió que ambos dirigentes salieran ilesos. Sin embargo, no deja de ser una situación gravísima la que vivieron estos trabajadores y que lamentablemente padecen a diario muchos dirigentes sindicales.
Cabe recordar que al menos 750 afiliados al SINTRAINAGRO fueron asesinados en los últimos años por organizaciones paramilitares, cifra que se incrementa a 1.300 si sumamos a dirigentes de otras organizaciones.
El último de ellos fue Tomás Rodríguez, un dirigente acribillado a balazos en mayo, en la región del Magdalena.
Tanto SINTRAINAGRO como la central CUT han denunciado en reiteradas ocasiones la situación de indefensión que padecen los dirigentes sindicales víctimas de amenazas y atentados como este.
Guillermo Rivera actualmente se encuentra sin escolta y sin vehículo para los traslados que necesita realizar en función de sus tareas sindicales. La Unidad Nacional de Protección se lo ha negado aduciendo falta de recursos. A Medardo Cuesta, por su parte, le autorizaron apenas un escolta para viajar a una zona de alto riesgo como es el Valle del Cauca.
Señor presidente, este tipo de irregularidades deben cesar, pues de ello depende la integridad física de nuestros afiliados.
El sindicato ha insistido en su apoyo a las negociaciones de paz que se desarrollan actualmente entre su gobierno y representantes de organizaciones guerrilleras para poner fin a más de cincuenta años de sangrientos enfrentamientos armados en Colombia.
Es por esa razón esperamos de su parte una eficaz intervención para brindar la seguridad adecuada a todos los dirigentes sindicales que han sido declarados objetivos de grupos paramilitares.
Nuestra Internacional, junto a sus 394 organizaciones afiliadas en 125 países, reclama enérgicamente a su gobierno que se tomen las medidas necesarias para proteger la vida de sus miembros en Colombia.
Solicitamos asimismo su intervención ante la cartera del Interior y ante la Dirección Nacional de Protección para que éstas brinden los recursos necesarios para salvaguardar la vida de los trabajadores y para que se esclarezcan los asesinatos de sindicalistas, cuyos autores permanecen sin castigo.
Sin otro particular, hago propicia la ocasión para saludarlo atentamente