La transnacional cárnica JBS, el mayor procesador de proteína animal del planeta, ha realizado fuertes campañas publicitarias en Brasil para las que recurre a celebridades como caras visibles de sus productos.

El destacado actor Tony Ramos y el cantante Roberto Carlos son algunos de los famosos que promocionaron los productos de JBS en los medios masivos de comunicación, aunque el caso del músico mercería un capítulo aparte (Ver artículo relacionado).

El asunto es que los trabajadores son testigos cotidianos de que la calidad que la compañía promociona en sus productos no se corresponde con la de sus propias condiciones laborales.

Con esa premisa, se les ocurrió hacer una serie de cortos que muestran a los consumidores qué hay detrás de los tan ponderados productos cárnicos de JBS.

“La idea surge a partir de ver los spots publicitarios de la compañía, que ponen un énfasis particular en la calidad de sus productos y se valen de figuras muy queridas y respetadas del gran público”, explicaron.

“Nos dijimos que teníamos que hacer algo para mostrar que esa calidad, que, en gran medida es responsabilidad de los trabajadores, no se traduce en buenas condiciones laborales y menos aún salariales”, señaló a La Rel Célio Elias, presidente del Sindicato de Trabajadores de la Industria de la Carne y Derivados de Criciúma y Región (SINTIACR).

En la última negociación salarial, la oferta de JBS fue ridícula: menos de un 1 por ciento de aumento, mientras invertía sumas multimillonarias en financiar a partidos políticos y en publicidad.

En este primer corto, los trabajadores ponen de relieve esa paradoja y denuncian, además, otro de los temas que mantiene estancada la negociación colectiva con la empresa: el plan de salud que, unilateralmente, JBS quiere modificar en detrimento de sus empleados.

Elias anunció que habrá otros dos cortos, que también serán respaldados por la CONTAC y la Rel-UITA.