Gerardo Iglesias | Patricia Alonso
28 de mayo
Día Internacional de Acción por la Salud de las Mujeres
Día Internacional de Acción por la Salud de las Mujeres
Camareras de piso, un colectivo postergado
La Organización Mundial de la Salud (OMS) celebra cada 28 de mayo la jornada de acción por la salud de las mujeres y considera que si bien se han registrado avances, todavía hay un debe gigantesco en este tema desde una perspectiva de género. La situación de las camareras de piso es un ejemplo claro de ello.
“El derecho a la salud es un derecho humano de las mujeres al que deben acceder sin restricciones o exclusiones de ningún tipo, y a través de todo su ciclo de vida”, proclama la OMS.
Desafortunadamente las mujeres también sufren discriminación en este aspecto.
En el ámbito del trabajo, además, existen sectores de actividad totalmente feminizados en los que las condiciones de salud y seguridad son pésimas.
Este es el caso, en particular, de las camareras de piso.
La UITA a nivel global y el Clamu en la órbita regional vienen desarrollando una campaña de denuncia que busca visibilizar las condiciones de precariedad a las que se enfrentan a diario estas trabajadoras y que las viene enfermando a tal punto que se han incrementado los retiros precoces de muchas de estas trabajadores por lesiones vinculadas a su labor.
Jornadas excesivas -en duración y en ritmo- y salarios muy bajos se suman a que realizan grandes esfuerzos físicos que les generan problemas de columna, hombros, rodillas, además de depresiones, ansiedad y otras afectaciones psicológicas.
Con un alto grado de precariedad laboral y un bajo nivel de sindicalización en muchos países, este colectivo, como el de las trabajadoras domésticas, es uno de los ejemplos más claros de la postergación, la discriminación y la explotación que sufren las mujeres en el mundo del trabajo, incluso en el ámbito de la salud,
La UITA y el Clamu han venido trabajando y lo seguirán haciendo para dar visibilidad y revertir la situación de estas trabajadoras.
Desafortunadamente las mujeres también sufren discriminación en este aspecto.
En el ámbito del trabajo, además, existen sectores de actividad totalmente feminizados en los que las condiciones de salud y seguridad son pésimas.
Este es el caso, en particular, de las camareras de piso.
La UITA a nivel global y el Clamu en la órbita regional vienen desarrollando una campaña de denuncia que busca visibilizar las condiciones de precariedad a las que se enfrentan a diario estas trabajadoras y que las viene enfermando a tal punto que se han incrementado los retiros precoces de muchas de estas trabajadores por lesiones vinculadas a su labor.
Jornadas excesivas -en duración y en ritmo- y salarios muy bajos se suman a que realizan grandes esfuerzos físicos que les generan problemas de columna, hombros, rodillas, además de depresiones, ansiedad y otras afectaciones psicológicas.
Con un alto grado de precariedad laboral y un bajo nivel de sindicalización en muchos países, este colectivo, como el de las trabajadoras domésticas, es uno de los ejemplos más claros de la postergación, la discriminación y la explotación que sufren las mujeres en el mundo del trabajo, incluso en el ámbito de la salud,
La UITA y el Clamu han venido trabajando y lo seguirán haciendo para dar visibilidad y revertir la situación de estas trabajadoras.
Gerardo Iglesias
Secretario regional UITA |
Patricia Alonso
Presidenta del Clamu |
Rel-UITA
29 de mayo de 2015