“¿Qué más hay que hacer para que el presidente Cartes reaccione?”
Hace hoy 66 días, un grupo de trabajadores de la línea 49 de transporte del Gran Asunción comenzó una protesta de la manera más terrible que pueda imaginarse: se crucificaron. Habían llegado a un estado de desesperación tal que recurrieron a ese imponente autocastigo.