En Montevideo,
Un nuevo asesinato
Rebrota el antisindicalismo
en el Valle del Cauca
en el Valle del Cauca
Desde que SINALCORTEROS se fusionó con SINTRAINAGRO, el 21 de julio del año pasado, se ha fortalecido la presencia sindical en la región del Cauca, alcanzando los 3.500 afiliados. Al mismo tiempo, se han intensificado los artilugios por parte de los empresarios para evadir sus responsabilidades con los trabajadores, negándose a negociar condiciones laborales, bajo la vista gorda
de las autoridades de gobierno.
de las autoridades de gobierno.
En este escenario, la semana pasada fue asesinado un nuevo dirigente sindical, Juan Carlos Pérez Muñoz que se desempeñaba como cortero en el ingenio La Cabaña, uno de los más antisindicales de la región y que además se mantiene en conflicto constante por la tierra, con campesinos de la zona.
La Rel dialogó con Adolfo Tigreros, asesor del Departamento del Azúcar del Valle del Cauca quien comentó los antecedentes de un conflicto que cobró la vida de otro trabajador en Colombia.
-¿Cuál es la situación que se está viviendo actualmente en el Valle del Cauca?
-En este momento lo que se está dando es una nueva embestida de las empresas propietarias de los ingenios y de las empresas contratistas contra los trabajadores que tienen el valor de afiliarse a SINTRAINAGRO.
A fines de 2011 se inició el proceso de formalización de las condiciones laborales en la gran mayoría de los ingenios del Valle del Cauca. Se firmaron convenios colectivos en 7 de los 13 ingenios de la región, quedando apenas 6 donde formalizar el tema de las condiciones de trabajo, en gran parte en pequeños y medianos ingenios.
Uno de esos, es el ingenio La Cabaña, propiedad de la familia Seinjet donde aún se está en proceso de organizar a los trabajadores que todavía laboran bajo el sistema de contratistas.
Esta empresa que tiene un largo historial de antisindicalismo se ha negado a negociar el pliego petitorio presentado en diciembre pasado por los trabajadores que conformaron una seccional sindical, despidiendo a unos 100 corteros entre los que se encuentra la totalidad de la Junta Directiva del Sindicato.
-El asesinato de Juan Carlos Pérez se da en medio de este proceso…
-En este contexto se destacaba la tarea realizada por el compañero Juan Carlos Pérez Muñoz, que fue asesinado vilmente el pasado 28 de enero.
Teniendo en cuenta que no se lo vincula con ningún otro tipo de actividad que no fuese su trabajo de cortero y su militancia sindical, existe la fuerte sospecha que su muerte esté vinculada a la actividad de organización que llevaba adelante.
Pero eso deberá esclarecerlo la justicia. Mientras se esclarecen los hechos, desde SINTRAINAGRO se están realizando las denuncias correspondientes ante diferentes organismos nacionales e internacionales.
-Colombia es el país donde más se comenten crímenes contra sindicalistas. ¿En este caso particular el gobierno nacional se ha manifestado de alguna manera?
-Aún no hay un pronunciamiento del gobierno ante el asesinato del compañero Juan Carlos y por parte del Ministerio del Trabajo hay una actitud muy permisiva para el tratamiento de este tema. Sobre todo en lo que refiere a la negociación del pliego de reclamos y a los despidos.
-¿Además de las denuncias, SINTRAINAGRO está realizando alguna otra acción por este caso?
-Estamos realizando movilizaciones, plantones y en este momento promoviendo acciones de solidaridad para ayudar a mantener a los compañeros que fueron despedidos, mientras esperamos que desde el gobierno se presione a estas empresas para que negocien de buena fe y reintegren a los trabajadores despedidos, al mismo tiempo que exigimos que se aclare el asesinato del compañero Juan Carlos Pérez Muñoz.
Hijos de cortadores de caña en la huelga de 2008
(Foto: Gerardo Iglesias)
Rel-UITA
6 de febrero de 2013
