La FETRABE ha intentado condicionar la firma del acuerdo salarial en el marco de los Consejos de Salarios con la renovación del convenio colectivo que tienen con el sindicato y que está vigente hasta el 31 de agosto inclusive.
“Los trabajadores del producción de Coca Cola, recientemente adquirida por la mexicana Femsa, firmamos el lunes 6 el acuerdo salarial en el ámbito de negociación tripartito de los Consejos de Salarios”, informó Gustavo Sotelo, vicepresidente del STCC.
El dirigente explicó que por ser el de la bebida un sector dinámico dentro de la economía se llegó a un acuerdo de incremento salarial de 8,5 por ciento el primer año, 8 el segundo y 7 el tercero. Además, se mantuvieron todos los beneficios sociales anteriormente conquistados.
“Fue un buen acuerdo dentro de los esperado. Se incorporó esta vez una cláusula gatillo por si la inflación se dispara dentro del plazo de vigencia del acuerdo. Lo único que no es positivo es que en la negociación anterior firmamos el grupo 1 (bebida) y el grupo 13 (distribución) y ahora no pudimos”, destacó.
Los dirigentes afirman que la negociación del grupo 13 está trancada porque el gremio patronal condicionó la firma del acuerdo salarial a la renovación del convenio colectivo, ya que quieren modificar algunos aspectos vinculados a los salarios.
“Queremos que quede claro que los Consejos de Salarios y las discusiones que allí tenemos nada tienen que ver con la negociación del convenio de condiciones de trabajo con FETRABE”, resaltó Javier Martínez, tesorero del STCC.
Para los dirigentes el error en el que incurre la federación patronal es mezclar la negociación salarial tripartita con la negociación del convenio.
“En 2007 el STCC acordó con la FETRABE que se incorporaran las horas extra administrativas que realizaban los choferes y ayudantes de camiones que distribuyen productos de Coca Cola”, recordó Sotelo.
Muchas veces después de finalizado el recorrido de reparto, estos trabajadores debían permanecer más tiempo descargando cajas o entregando facturas o dinero.
El sindicato negoció que ese excedente laboral fuera computado dentro del salario, algo que se dispuso en un promedio de 62 horas fictas, aunque el trabajo se realizara por debajo o sobre esa cantidad.
Ahora la federación patronal quiere reducir esas horas fictas a 37,5, basándose en un supuesto estudio que evalúa que ese sería el tiempo que necesitarían un chofer y su ayudante para cumplir con su tarea.
“Significaría una reducción salarial próxima al 24 por ciento sin reducir la carga laboral. En criollo, pagar menos por el mismo trabajo”, apuntó Martínez.
El Sindicato está dispuesto a negociar las nuevas condiciones que plantea la FETRABE pero en otro ámbito, actualizando los parámetros de productividad y llevando a cabo nuevos estudios de las rutas de venta, sobre todo teniendo en cuenta factores externos a la labor de choferes y ayudantes como el tránsito, las distancias entre clientes, etcétera.
Por ahora los fleteros no han mostrado interés en contemplar algunas circunstancias que para los trabajadores son importantes.
“No es un tema sencillo porque hay que definir los parámetros de productividad, hasta dónde llega nuestra jornada laboral, nuestras tareas asignadas. La realidad de hoy es distinta a la de 2007, año en que firmamos el convenio”, dice Martínez.
Martín Capotte, delegado sindical y trabajador de la distribución, observa que no solo el tránsito ha cambiado mucho desde entonces. También ha cambiado el número de productos que distribuyen.
“Pasamos de unos 50 productos a 150 más o menos, y a módulos de distribución que van desde barrios tan distantes como de Tres Cruces a La Teja”.
Roberto Magallanes agregó que también habría que tener en cuenta el volumen de carga de los camiones de Coca Cola, que en comparación con los demás del sector de la bebida, duplican la cantidad de mercadería.
“Ya nos reunimos con el director de Trabajo, Jorge Mesa, para ponerlo al tanto de esta situación y él, como representante del gobierno dentro de los Consejos de Salarios, está de acuerdo en que el convenio debe ser discutido en otro ámbito y que lo ideal es que la etapa de negociación en el ministerio se cierre lo antes posible”, señaló Sotelo.
Los dirigentes informaron que el viernes 10 se reunirán con directores de FEMSA, entre ellos la gerente general Andrewina McCubbin, quien está en el cargo desde la anterior administración (The Coca Cola Company).
“Queremos saber cuál es la postura de Montevideo Refrescos SRL. Hasta ahora no se han manifestado oficialmente y como agremiación estamos preocupados porque esta medida afectará a unos 400 trabajadores en todo el país”, concluyó Sotelo.
En Montevideo, Amalia Antúnez