Trabajadores botados como racimos podridos

Aquel 4 de marzo de 2019 fueron a trabajar como todos los días. El gran portón metálico cerrado por una cadena con candado impedía el acceso a la terminal de operaciones portuarias de Chiquita Brands en Limón, una de las provincias más castigadas por la pobreza y el desempleo en Costa Rica.