Haití | SOCIEDAD | CORRUPCIÓN

Con Arnold Antonin, del Centro Pétion Bolivar

“Haití está aquí, Haití no está aquí”

Este domingo 18 de noviembre, coincidiendo con los festejos de la victoria del Ejército haitiano sobre las tropas francesas de Napoleón Bonaparte (batalla de Vertieres), cientos de personas manifestaron en las calles de la capital, Puerto Príncipe, en reclamo de la salida del presidente Jovenel Moise ante la inoperancia de su gobierno parta juzgar los casos de corrupción en Petrocaribe*. La manifestación fue reprimida y la policía causó seis muertos, cinco heridos y 23 detenidos. Antes de esto, nadie hablaba de Haití.

Según una investigación del Senado, al menos 14 exfuncionarios estuvieron vinculados al desvío de los fondos durante el gobierno del expresidente Michel Martelly (2011-2016) y ninguno ha sido procesado judicialmente.

Para conocer de primera mano lo que está sucediendo en el país conversamos con el cineasta Arnold Antonin, del Centro Pétion Bolivar, organización con la que la Rel-UITA mantuvo un programa de alfabetización rural durante los años 90**.

-¿Qué está pasando en Haití?
-Las cosas están en pleno desarrollo por lo que no podemos saber cómo van a terminar, pero todo empezó con un movimiento en las redes.

Un movimiento de jóvenes que inició una lucha contra la corrupción ante el presunto desvío de más de 3 mil millones de dólares de Petrocaribe, y para ello realizó una convocatoria no muy organizada el día del aniversario de la muerte del padre de la patria, Jean Jacques Dessaline, el pasado 17 de octubre.

Fue realmente una manifestación multitudinaria, miles de personas salieron a las calles a manifestarse contra la corrupción y contra la impunidad, no solo en Puerto Príncipe, sino en diversas otras ciudades de la provincia.

En ese momento, lanzaron la idea de que el día de la victoria del Ejército Revolucionario Haitiano contra los franceses (18 de noviembre) se realizara otra manifestación.

Pero a raíz de la primera, la del 17 de octubre, varios grupos políticos salieron a exigir la renuncia del actual presidente, porque estaría implicado en casos de corrupción y porque además no tiene ninguna intención de llevar a cabo el juicio a los implicados en el desvío de esos millones.

Reclamos contundentes

-¿Cómo analizas la coyuntura política?
-El gobierno no está entendiendo que estas manifestaciones son serias. La gente está reclamando justicia de forma contundente.

Este gobierno ha perdido completamente la credibilidad y el pueblo se está levantando en su contra.

En julio ya se dieron manifestaciones muy violentas debido a un incremento del 50 por ciento en el precio de la gasolina, y estamos en vísperas de un fracaso económico, con una devaluación tremenda.

El país importa tres veces lo que exporta y hay un 80 por ciento de desempleo.

Ningún control

-¿De dónde proviene el dinero que generó toda esta situación?
-El dinero de Petrocaribe vino de Venezuela, de un acuerdo firmado en la época del presidente Hugo Chávez. Fue una plata casi regalada porque Haití no tiene condiciones de devolverla.

Seguro que de esos más de 3 mil millones de dólares que llegaron a Haití hubo un arreglo para que algún venezolano se quedara con una parte.

Nunca hubo ningún tipo de control, ni hubo licitaciones para las supuestas obras que se financiarían con ese fondo. Obras que, además, nadie sabe cuáles son.

-Algo similar pasó en Nicaragua…
-Sí. Ahora la lucha está en descubrir qué se ha hecho con esta plata, dónde y quiénes la tienen.

No sabemos qué va a pasar pero personalmente creo que se puede llegar a la destitución del gobierno.

Los observadores internacionales dicen que es necesario que se respete la Constitución y que el gobierno actual debería culminar su mandato, a la vez que se juzguen a los presuntos culpables de la malversación de fondos de Petrocaribe.

Una institucionalidad vacía de contenido

-Pero eso no ayuda mucho tampoco.
-No. Lo que sucede es que la comunidad internacional apoyó la elección de Jovenel Moise, una elección que desde el vamos no tuvo mucha legitimación popular.

Apenas el 15 por ciento de los habilitados para votar lo hicieron, lo que habla del bajo nivel de aprobación de la ciudadanía.

Pero la comunidad internacional invirtió mucho en estas elecciones y ahora quieren defender-como de costumbre-hasta el final la aparente institucionalidad.

Lo más grave es que en el momento no hay una alternativa real a este gobierno.

Ahora una serie de grupos políticos, entre los que se encuentran posturas moderadas, proponen que se cree un gobierno de transición.

Sin alternativas

En Haití, se han creado muchos gobiernos de transición. Varios fueron los gobiernos que no culminaron su mandato. Por lo tanto, para crear ahora un nuevo gobierno se debe tener un programa claro con gestores creíbles, algo que cada vez queda menos en el país.

Se da una suerte de locura y de lucha por el poder que es algo sistemático acá y mientras tanto la pobreza aumenta a diario y a niveles caóticos.

Recién vengo del sur y la situación de pobreza es insostenible. El grado de destrucción en las ciudades y el litoral debido a los altos índices de pobreza contrasta con los hermosos paisajes que a pesar de las catástrofes naturales que ha vivido Haití insisten en renacer.

La situación del país es grave.

Nuevas migraciones

Es posible que se dé una insurrección general y si esto es así hay gran temor de que vuelva la intervención militar por parte de Estados Unidos o de la ONU (Minustah) o inclusive de República Dominicana.

-Para muchos haitianos la solución a esta grave crisis ha sido migrar.
-Ha habido en Haití un éxodo impresionante, primero de cerebros que migran a Canadá y Estados Unidos, y luego de jóvenes que deciden ir a países de América Latina porque no pueden ingresar a los países de Norteamérica.

Marcharon principalmente a Brasil durante el período de las Olimpiadas y el Mundial de fútbol con la esperanza de encontrar trabajo y pensando que estarían mejor.

Llegados allá se dieron cuenta que las condiciones laborales en ese país no eran las mejores e iniciaron otra migración hacia el norte, muchos marcharon a pie hasta la frontera entre México y Estados Unidos.

Por otra parte hace dos años empezaron a partir unos 240 jóvenes haitianos por día con rumbo a Chile.

Fueron 200.000 en un año, un éxodo masivo con muchas dificultades sobre todo porque no hablan el idioma, porque son negros en su inmensa mayoría, los chilenos no estaban acostumbrados a ver este tipo de migrante.

Luego de la victoria de José Piñera las condiciones cambiaron radicalmente, se necesita visa para entrar y en la actualidad el país andino busca a haitianos que voluntariamente quieran volver a su país y pone un avión a disposición. Ya han regresado algunos.


*Mediante Petrocaribe, Venezuela ofrece desde 2005 a países de la región el suministro de crudo a bajos precios, con créditos blandos y facilidades financieras a 25 años con dos de gracia.

** Fundación reconocida de utilidad pública, cuyo principal objetivo es fomentar la democratización del sector audiovisual en Haití. El espacio también tiene una biblioteca y una cierta cantidad de equipos de filmación que se pueden alquilar. Finalmente, el centro Pétion-Bolivar es mejor conocido por la producción de documentales y ficciones del director haitiano Arnold Antonin.

Nota del Editor: Agradecemos a Faruk Miguel la coordinación para esta entrevista.