Padece México importación crónica de granos y oleaginosas

Con base en cifras del Segundo Informe de Gobierno de la presente administración, entre las principales importaciones que realizará el país en 2014 están 6,8 millones de toneladas de maíz; 4 millones de toneladas de trigo; 3,5 millones de toneladas de soya; 1,1 millones toneladas de sorgo; 890.500 toneladas de arroz y 130.000 toneladas de frijol.

 

De acuerdo con los datos que proporciona el documento, sólo para comprar maíz se destinarán US$ 1.280 millones; en semilla de soya, US$ 1.175 millones; otras semillas y frutos oleaginosos, US$ 670 millones; trigo US$ 665 millones; arroz, US$ 210 millones y sorgo, US$ 35 millones.

 

Para estos alimentos en conjunto México erogará más de US$ 4.000 millones.

 

El Informe refiere que la producción de maíz para este año ascenderá a 22,8 millones de toneladas; de trigo a 3,8 millones; de sorgo 8 millones; de frijol 1,2 millones; de cebada 845.000; de soya 352.000 y de arroz 204.000 toneladas.

 

Ante este escenario que ha sido recurrente para el país y la falta de liquidez de los productores, que se empezó a manifestar el año pasado por la caída en los precios, la Confederación Nacional de Productores Agrícolas de Maíz de México (CNPAMM) advierte que para 2015 los agricultores posiblemente dejen de sembrar maíz, sorgo y trigo al no poder recuperar sus costos de producción.

 

Refirió que de acuerdo con los últimos reportes del Departamento de Agricultura de Estados Unidos en esa nación habrá una producción de más de 365 millones de toneladas e inventarios cercanos a los 30 millones de toneladas, lo cual generarán una más dramática baja de precios internacionales del maíz de la cosecha primavera-verano 2014 que está por iniciar.

 

 

“Esto –remarcó– puede provocar que la falta de ingreso y de liquidez limite al productor que tiene financiamiento ya sea de la banca de desarrollo o comercial o de los acopiadores y no cumpla con sus compromisos, no por morosidad, sino porque con estos precios y las alzas en los costos de los insumos para llevar a cabo su producción no le dejan utilidades para hacer frente a esos compromisos, mucho menos al bienestar de su familia”.
 

Con este panorama, desgraciadamente, es muy posible sucumban muchos maiceros, pues se augura que también se limitará el financiamiento y no se tendrá acceso al crédito, la producción en consecuencia será menor y se incrementarán las importaciones agravando la dependencia alimentaria, anotó.

 

Salazar Arriaga consideró que dicho impacto tendría menor efecto si se actualiza el Ingreso Objetivo, al menos aplicando un incremento del 68 por ciento -que es el promedio de incremento en los costos de producción-, por lo que pasaría de los 2.200 pesos por tonelada actuales a 3.670 pesos por tonelada.

 

El dirigente consideró que la autoridad debería ya atender esta solicitud, pues en los estados productores de maíz y otros granos (Jalisco, Guanajuato, Michoacán, Chiapas, Campeche, Puebla Estado de México, Hidalgo), ya hay mucha inquietud.

Por ejemplo, en Guanajuato fueron detenidos 12 compañeros por manifestarse y esto empieza a crecer con situaciones de alarma, por lo que es mejor que tanto la autoridad como los legisladores empiecen a buscar presupuesto para hacer frente a tan grave problema y se busque la actualización del Ingreso Objetivo, insistió.