CCOO y UGT presentan el estudio “impacto de la externalización del departamento de pisos en el sector hotelero”
El sucio secreto de la industria hotelera es que las trabajadoras y trabajadores que limpian las habitaciones padecen daños físicos y abusos.
La industria descansa sobre los hombros del personal de piso, pero su contribución a la industria mundial del turismo se encuentra enormemente subvalorada.
A través de la iniciativa de la UITA “Haga mi lugar de trabajo seguro”, el personal de piso de todo el mundo ha estado denunciando las condiciones laborales abusivas y organizándose para reclamar que la industria hotelera internacional reconozca su dignidad, sus derechos y sus sindicatos.
El personal de piso realiza extenuantes tareas diarias por bajos salarios y escasa o ninguna estabilidad laboral. En una amplia mayoría son mujeres, muchas de ellas migrantes.
Pocos huéspedes se imaginan que el índice de lesiones y enfermedades laborales del personal de piso se sitúa entre los más altos respecto a otros grupos ocupacionales.
Este año, el personal de piso de hoteles de docenas de países tomará nuevamente medidas de acción a través de la iniciativa de la UITA a favor de salud, seguridad y condiciones laborales dignas.
Los sindicatos destacarán el derecho de estas trabajadoras a negociar a través de sus organizaciones sindicales sus condiciones de empleo, un derecho humano fundamental.
El colectivo de las camareras de pisos, en muchos casos, representa entre un 25 y un 30 por ciento de las plantillas de los hoteles y apartamentos, lo que supone unas 96.000 en toda España.
Estas trabajadoras son las encargadas de que las habitaciones estén en perfecto estado cuando el cliente las utiliza, ofreciendo uno de los servicios más valorados por los turistas que se hospedan en los establecimientos hoteleros.
Por lo tanto debe ser considerado trabajo esencial, ya que cubre una de las necesidades básicas del cliente: descansar en un entorno agradable y limpio.