“La escalada ofensiva emprendida por Backus AB InBev en contra del compañero Luis Samán, lejos de ayudar en la búsqueda de una solución consensuada al conflicto, aleja aún más la posibilidad de un acercamiento y un acuerdo entre las parte”, dice la nota.
La Rel-UITA, junto a sus 87 organizaciones afiliadas en 18 países, insta a que la empresa reconsidere la actitud mostrada hasta el momento y que deponga todo tipo de acción que criminalice el derecho de protesta y cercene los derechos de trabajadores y trabajadoras.
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