En Chimbote, Ancash, donde opera una de las tres plantas, hay diferentes áreas, entre otras, la de Consumo Humano Indirecto (CHI), con la elaboración de harina y aceite de pescado y la de Consumo Humano Directo (CHD), con la elaboración de conservas y productos congelados.

Esa última se subdivide en subáreas (sectores), que son las de filete, envasado, empaque, estiba y congelados.

El 28 de diciembre pasado, sin ningún aviso, Pesquera Hayduk reunió al personal del área CHD y le informó que, a partir del 1 de enero de 2024, con excepción del personal de congelados, pasarían a ser parte de la nueva empresa Industrial Conservera San Pedro SAC.

La empresa justificó la medida con la decisión de realizar una “reorganización societaria simple”.

Con dicha operación, todas las actividades, que incluyen procesos, instalaciones, maquinarias, herramientas, provisiones contables, flujos de caja, directivos empresariales y trabajadores, pasarán a formar parte de la nueva empresa.

Asimismo, aclaró que, en este traspaso automático y cambio societario, no habrá una liquidación de beneficios, ya que todos los trabajadores pasarán directamente a la planilla de la nueva empresa y les serán reconocidos todos los beneficios adquiridos en el tiempo, incluyendo antigüedad y categoría.

“Nunca nos dijeron que estaban preparando una reorganización. Nos avisaron cuando las cosas ya estaban hechas”, dijo a La Rel, María Valverde, secretaria general adjunta del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Empresa Pesquera Hayduk SA (SINTEPHSA).

Valverde explicó que, si bien se están respetando los beneficios y condiciones de trabajo que trabajadores y trabajadoras percibían antes del traspaso, hay elementos que preocupan sobremanera.

“Durante la reunión de diciembre pregunté dos cosas puntuales: si se mantenía el mismo horario de trabajo de 8 horas de lunes a sábado y qué iba a pasar con nuestra afiliación y cargos directivos sindicales.

Lamentablemente y de forma unilateral —continuó Valverde— San Pedro SAC nos avisó que las cosas iban a cambiar, quedando demostradas las reales intenciones de la empresa”.

Además de cambiar el horario de trabajo, imponiendo cuatro días (de martes a viernes) de 10 horas y un día (sábado) de ocho, la nueva empresa advirtió que todo lo que se refería a nuestro sindicato y nuestros cargos quedaba sin efecto.

De un número aproximado de 300 personas trasladadas a la nueva empresa, al menos 75 están afiliadas al SINTEPHSA, incluyendo Valverde.

“Nos dijeron que, si queríamos organizarnos, debíamos crear un sindicato nuevo. Esto es absurdo”, lamentó la dirigente sindical.

Además, explicó que los gerentes, jefes y apoderados legales de San Pedro son prácticamente los mismos de Hayduk, y que la nueva empresa aún no cuenta con los documentos necesarios para estar operando.

“Aquí no sólo tenemos una tercerización oculta, sino también una desnaturalización de los contratos de tercerización. El verdadero objetivo es debilitar y tumbar al sindicato”, advirtió Valverde.

La organización obrera ya introdujo una denuncia ante la Superintendencia Nacional de Fiscalización Laboral (Sunafil) para que investigue y aclare el asunto.

“Solicitamos una inspección a Sunafil y aún no se ha realizado. También gestionamos un extraproceso* ante las autoridades del trabajo para que Hayduk explique las razones de la supuesta reorganización societaria”, explicó la secretaria general adjunta del SINTEPHSA.

“Eso no puede quedarse así y pedimos a la Rel UITA que nos apoye y ayude a difundir esta denuncia a nivel internacional”, concluyó.