Con Siderlei de Oliveira
Un Congreso participativo como pocos
El presidente de la Confederación Nacional de Trabajadores en las Industrias de la Alimentación (CONTAC), Siderlei de Oliveira, compartió con Sirel su evaluación sobre el 26 Congreso de la UITA, e informó sobre el proceso de negociación de la Norma Reguladora (NR) para la industria frigorífica brasileña.
-¿Cuál es tu evaluación del reciente Congreso Mundial de la UITA?
-Ha sido uno de los Congresos más participativo de todos a los cuales he asistido. Un alto número de delegados tuvieron oportunidad de intervenir y el formato del evento acompañó y permitió esa excelencia. Las resoluciones adoptadas, además, tuvieron aspectos interesantes.
Esta vez las quejas fueron generalizadas, ya que ahora no sólo reclamábamos los delegados del tercer mundo, sino también los del primer mundo como, por ejemplo, los de Europa, donde está golpeando una severa crisis económica. A tal punto fue así que resultaba difícil distinguir cuándo hablaba alguien del sur o del norte porque se usaban las mismas palabras para describir las respectivas realidades: desempleo, crisis, incertidumbre, ajustes, recortes presupuestales, etc.
Incluso se invirtieron algunos papeles tradicionales, porque en este Congreso, por ejemplo, Brasil no habló de desempleo porque no es un problema como lo era hace algunos años, sin embargo los europeos lo mencionaban en el primer lugar de sus preocupaciones.
En ese sentido, creo que Brasil tuvo intervenciones un poco diferentes a los demás países, porque ninguno de sus delegados habló de crisis como lo hicieron los demás. Esto obedece a la coyuntura que está viviendo la economía del país.
-¿Qué otro punto puedes destacar?
-La constatación del avance de las transnacionales brasileñas en el mercado mundial. En el sector alimenticio algunas de las principales empresas globales son brasileñas, como BRF, mayor avícola del mundo, JBS el mayor frigorífico bovino mundial, Marfrig es el que le sigue en ese sector, la mayor empresa cervecera es InBev.
Como antes nosotros nos quejábamos de la explotación de la mano de obra barata en Brasil por parte de empresas extranjeras, en la actualidad las principales son brasileñas, especialmente los frigoríficos. En este sentido, los sindicatos europeos tienen reclamos muy fuertes por la postura de los frigoríficos brasileños en ese continente.
-¿Cómo fue la participación de América Latina?
-Tuvimos una gran delegación. Una de las mayores que recuerdo. Como siempre, ella cumplió un papel destacado. El trabajo de la Regional Latinoamericana es, sin duda, uno de los mejores dentro de la UITA.
Se colectivizaron informes completos y de gran claridad y calidad. Una vez más, América Latina demostró que tiene una Regional muy fuerte y que trabaja mucho, con un secretario regional muy activo, lo que quedó de manifiesto en su rendición de cuentas.
-Pasando a otro tema, ¿en qué punto está el debate en Brasil sobre la Norma Reguladora de las condiciones de trabajo en los frigoríficos?
-Sin duda faltan aún algunas reuniones para agotar el debate. Dependerá mucho de la posición de los empresarios que sigue siendo bastante radical en lo que se refiere a los tres puntos básicos de la NR, a saber:
– las modificaciones en los lugares de trabajo
– la reducción del tiempo de exposición
– la participación de los trabajadores en la implantación y el control de la aplicación de la NR
Esta última es la más debatida ya que las empresas alegan que los trabajadores quieren actuar como fiscalizadores. No se trata de eso, no queremos sustituir al Ministerio de Trabajo. Pero es necesaria nuestra participación para asegurar su aplicación en un país del tamaño de Brasil y con 8 mil frigoríficos.
Si no emplazamos un sistema en el cual los sindicatos puedan intervenir, por ejemplo cuando sea necesario denunciar incumplimientos, entonces la NR quedará en una norma inútil, como tantas otras leyes que sólo existen en el papel, pero no en la práctica.
La situación actual, entonces, es que una parte no acepta estos puntos y la representación del gobierno no los defiende. También dificulta un poco que tengamos un nuevo Ministro de Trabajo, Carlos Brizola Neto, que no ha participado en el proceso de discusión de la NR, y es él quien debe firmar la norma ya que no pasa por el Senado ni por Diputados. Se trata de un acto del gobierno que resuelve el Ministro.
Hemos pedido una audiencia con él para establecer un primer contacto y exponerle nuestra posición en este tema. Tenemos mucha esperanza en que todo saldrá bien.
Foto: Rel-UITA