-¿Cuáles fueron los principales acuerdos de la asamblea del SUNTRANEP del 3 de febrero?
-Se ratificó la confianza a la comisión negociadora del sindicato, y se la autorizó a dar por fracasada la etapa de conciliación si los representantes de la empresa no cambian su posición negativa e intransigente. También se habilitó para declarar la huelga general indefinida. Los trabajadores y trabajadoras no están dispuestos a aceptar el peseteo de parte de Nestlé.
-Nestlé no quiere negociar, pero está obligada a participar en las reuniones de conciliación. ¿Cree que se podrá avanzar en este terreno?
-Hoy miércoles tenemos la quinta reunión en el Ministerio de Trabajo. Esperamos que la compañía tenga voluntad, por fin, de dar solución a nuestras demandas, caso contrario aplicaremos lo acordado en la asamblea, y comunicaremos el plazo de huelga indefinida.
La comisión negociadora de la empresa quiere otorgarnos migajas, trata de medir fuerzas, no entiende que para nosotros es un tema de justicia.
De no prosperar, lamentablemente Nestlé también se verá afectada en su imagen ya que se promueve como la empresa de alimentación y bebidas más grande del mundo que ayuda “a las personas a cuidarse a ellas mismas y a sus familias”. Lamentablemente, en su agenda no estamos todos sus trabajadores y trabajadoras.
Lo que no entendemos es por qué la empresa, el 5 de febrero, en reunión general, informó del rotundo éxito de 2018, al haberse alcanzado los objetivos en todas las categorías (culinarios, lácteos, helados, panetones, café), felicitó a todos los trabajadores por ese gran éxito en la región Perú-Bolivia, pero se niega a atender el pliego de reclamos de los trabajadores del SUNTRANEP.
-¿Están solos entonces?
-No, contamos con el respaldo de la UITA y la FELATRAN.
El secretario regional de la UITA está haciendo gestiones para la denuncia internacional a Nestlé Perú a fin de no permitir el atropello a la dignidad de los afiliados al SUNTRANEP.
Si la huelga es el único camino vamos a recorrerlo. Dependerá también de la voluntad empresarial que esto no sea así.
Foto: Suntranep
En Lima, Julia Vicuña