Hoy en día, existen buenos motivos para temer que se pierdan conquistas en materia de igualdad logradas en los últimos 50 años, ya que la pandemia amplía las desigualdades de género y agrava los desafíos cotidianos que enfrentan las mujeres.
Informes de la OIT y la OCDE confirman que las trabajadoras se han visto afectadas de manera desproporcionada por la pandemia, ya que representan la mayoría de la fuerza laboral en los sectores donde más empleos se han perdido y la reducción de horas de trabajo ha sido mayor.
En el Sur, las mujeres constituyen la mayoría de la fuerza de trabajo rural e informal y en gran parte carecen de protección social.
A nivel mundial, las mujeres tienen más probabilidades de ser empleadas en condiciones precarias, incluido el trabajo a tiempo parcial, lo que aumenta su vulnerabilidad social y las posibilidades de que se vean obligadas asumir la responsabilidad del trabajo no remunerado de la familia o de la casa.
Las cuarentenas y los confinamientos han aumentado trágicamente la violencia de género, incluida la violencia doméstica y el acoso sexual.
Pero no tenemos que desesperarnos. Nuestra historia está hecha de luchas.
Las afiliadas a la UITA ya han promovido y puesto en práctica fructíferas políticas de igualdad.
Este 8 de marzo debemos plantear más que nunca planes de igualdad sindical que comprendan compromisos para:
• Continuar promoviendo la conducción sindical de mujeres y su afiliación s a sindicatos.
• Evitar que las mujeres pierdan sus puestos de trabajo mediante la negociación de políticas que las mantengan en su empleo, especialmente en empresas que van hacia la automatización y suprimirán tareas.
• Ayudar a las mujeres a encontrar nuevos trabajos si los han perdido.
• Negociar políticas de género para que se contrate a más mujeres en mejores condiciones, ampliar las oportunidades laborales y revalorizar los trabajos tradicionalmente desempeñados por mujeres (mediante equidad salarial que incluya investigaciones sobre igualdad).
• Garantizar que las reivindicaciones de la negociación colectiva demanden evaluaciones de los efectos de las políticas de igualdad relacionadas con covid-19.
• Priorizar la lucha contra la violencia de género en el mundo del trabajo, incluida la violencia doméstica, a través de la promoción del C190 y la R206 de la OIT.
• Salud y seguridad en el trabajo con consideraciones de género.
• Lograr un sistema alimentario con igualdad de género desde la tierra al plato.
• Fomentar redes de trabajadoras y participación en las actividades de la UITA sobre compañías transnacionales.
• Adherir a campañas para invertir en servicios de atención pública de calidad que tengan el potencial de generar empleos decentes, especialmente para mujeres.
• Negociar disposiciones de cuidado infantil en los convenios colectivos.
• Realizar campañas para evitar el recorte de subsidios gubernamentales y de protección social, especialmente en los presupuestos de salud y educación, salarios y pensiones, que tienen un efecto desproporcionado en mujeres, niñas y niños.
• Colaborar en solicitudes de la sociedad civil para que se hagan auditorías de las respuestas del gobierno a la crisis del Covid-19 con consideraciones de género.
El Día Internacional de las Mujeres tiene su origen el 8 de marzo de 1857, día en que las trabajadoras textiles del Lower East Side de Nueva York se manifestaron por sus derechos.
A escala internacional se lanzó en 1910 en la segunda Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas en Copenhague y lo conmemoraron por primera vez, en 1911, millones de personas trabajadoras en Austria, Dinamarca, Alemania y Suiza.
El Día Internacional de las Mujeres es producto del movimiento sindical socialista, y sigue siendo tan cierto como siempre que la afiliación sindical es la mejor defensa contra la discriminación.
La lucha más importante es la lucha por el derecho de todas las personas trabajadoras a afiliarse y ser representadas por un sindicato.
Pero no tenemos que desesperarnos. Nuestra historia está hecha de luchas.
Las afiliadas de la UITA ya han promovido y puesto en práctica fructíferas políticas de igualdad. El Día Internacional de las Mujeres celebra esta lucha en curso.