Son más de 70 las mujeres que denuncian haber sufrido abusos en plantaciones explotadas durante años por algunas de las marcas británicas más populares, entre las que se encuentran PG Tips, Lipton y Red Label, de la cadena de supermercados Sainsbury’s.

Gracias al trabajo de una infiltrada que pasó por el proceso de selección al que se ven expuestas las mujeres que postulan para trabajar en las plantaciones, se pudo conocer todo tipo de irregularidades que culminan con pedidos de favores sexuales a cambio de un puesto de trabajo.

Se las cita para una entrevista cara a cara y estas se realizan en habitaciones de hoteles o en autos.

La legisladora Beatrice Kemei fue quien presentó las pruebas en el parlamento e inmediatamente se ordenó una investigación.

Kemei, que representa a las mujeres de una zona productora de té del condado de Kericho, afirma que el informe ponía de manifiesto el “arraigado” acoso sexual en “las multinacionales del té que operan” en Kenia.

Una de las empresas propietarias de esas plantaciones es Unilever.

No es la primera vez que la transnacional enfrenta acusaciones de este tipo.

Hace más de 10 años Unilever puso en marcha un plan de “tolerancia cero” frente al acoso sexual, así como un sistema de denuncia y otras medidas a raíz de una acusación de este tipo.

Sin embargo, en el documental* queda evidenciado que incluso las mujeres abusadas se veían forzadas a firmar un consentimiento como parte de este plan.

La empresa vendió sus operaciones en Kenia mientras la BBC registraba el material en secreto.

El nuevo propietario, Lipton Teas and Infusions, declaró que había suspendido a dos directivos y ordenado una “investigación completa e independiente”.

Tom Odula, corresponsal de la BBC, habló con mujeres que trabajaban en plantaciones de té de ambas empresas.

Varias le contaron que, como el trabajo es tan escaso, no les queda más remedio que ceder a las exigencias sexuales de sus jefes o enfrentarse a no tener ingresos. Y el círculo se cierra.

* https://youtu.be/1wMdnCx6eUc