Francisco de Paula «Paí» Oliva
Un aviso que ojalá no hubiera que darlo
Todo golpe de Estado, poco a poco, va mostrando su verdadero rostro
Dicen que soy flemático, y eso significa que además de vivir el presente con indignación, me viene la sospecha que el posible futuro próximo puede no venir tan bueno y que lo estamos construyendo sin saberlo.
Que a los que dieron el golpe les conviene que la comunidad internacional los respalde, nadie lo duda. Y que miembros de esta comunidad internacional han llegado ahora para “examinarnos”, es de dominio público.
¿Entonces?
Y, aquí, entra la viveza criolla de la que todos participamos. También los “golpistas”.
Si van a venir a “examinarnos” mostrémosles -piensan ellos- que aquí no ha ocurrido nada. Sólo que a Lugo lo quitaron por “ineficiente”.
Pero que todo está tranquilo, y aun mejor que antes. Ojalá todos hubiéramos escuchado el discurso de Federico Franco del pasado miércoles. ¿Tekopora1 desde los 80 años? No, por favor, desde los 65. Descentralización y más de un centenar de millones de dólares para los intendentes. Gratuidad en la salud y un trato exquisito. Y, por supuesto, la famosa computadora para todos, porque así nos desarrollamos.
Paralelamente los medios masivos de comunicación abundan en buenas noticias. Los robos y asaltos desde el golpe dejaron de existir. Aunque en realidad sigan.
¿Libertad de expresión? Pero, ¿en qué país existe un micrófono abierto para decir lo que se quiera?
Así que ahora que han venido para “examinarnos”, se va a realizar todo lo posible para dar la imagen de que Paraguay es el país de las maravillas de Alicia.
Conclusión: en defensa de la democracia perdida usemos los medios que aun nos quedan, pero cuidado con hacerles el juego para que muestren una realidad tan positiva que es falsa, porque durará hasta que se vayan los representantes extranjeros. Evitemos el cretinismo útil.
No olvidemos que, todo golpe de Estado, poco a poco, va mostrando su verdadero rostro.