22
Junio
2017
Honduras | Sindicatos | ALIMENTACIÓN

Violaciones flagrantes a los derechos sindicales

Rel-UITA
20170622 mision UITA 960x450

Reunión de la Misión de la UITA el día 5 de mayo de 2017 | Foto: Giorgio Trucchi  

Las tres centrales sindicales hondureñas pidieron la intervención del ministro de Trabajo para solucionar conflictos con empresas transnacionales que se niegan desde hace años a respetar los derechos de sus trabajadores y trabajadoras.
En un mensaje conjunto, las centrales CGT, CUTH y CTH recuerdan a Carlos Alberto Madero Erazo, secretario de Estado de Trabajo y Seguridad Social, que desee hace largo tiempo no hay novedad sobre múltiples problemas que involucran a organizaciones sindicales afiliadas a la UITA.  

“El Derecho a la sindicalización y la Negociación Colectiva, sigue siendo negado por la transaccional Fyffes, que continua sin reconocer la legitimidad de la subseccional del Sindicato de Trabajadores de la Agroindustria y Similares (STAS)”, apuntan.

En enero pasado, el gobierno hondureño se comprometió ante una delegación de derechos humanos sindicales de la Unión Europea a mediar entre las partes, pero nada ha hecho desde entonces.

El comunicado cita en ese sentido una carta que el 12 de junio pasado dirigiera al propio ministro el secretario regional de la UITA, Gerardo Iglesias, destacando ese incumplimiento y recordando “la política antisindical e intimidatoria” que “en total impunidad” lleva a cabo Fyffes.

Iglesias se había reunido con Madero Erazo el 9 de mayo en Tegucigalpa.

Una situación similar se vive en Cervecería Hondureña, filial de la transnacional AB-InBev, que desde hace tres años multiplica las maniobras para no pactar un nuevo convenio colectivo con el Stibys.

La compañía “ha desplegado una enorme campaña desde Miami, acompañada del presidente de Honduras, publicitando que invertirá 25 millones de dólares en una nueva línea de cerveza. Al respecto aclaramos que se trata, como históricamente, de una reinversión de ganancias generadas en la misma empresa por el trabajo de los hondureños”.

Cervecería Hondureña incumple además el convenio colectivo que “firmó de mala gana” en 2011 y continúa tercerizando y precarizando el trabajo, así como negando aumentos salariales a sus empleados desde 2014.

El STIBYS se niega a aceptar la oferta de la empresa de negociar la situación de apenas 210 de los 591 casos de trabajadores tercerizados.

Las centrales exigen al ministro que intervenga sin más dilatorias en ambas situaciones y ponga fin a las flagrantes violaciones a los derechos más elementales de los trabajadores y trabajadoras hondureños por dos megaempresas que se burlan de las leyes nacionales y de los convenios internacionales de la OIT.