En las transnacionales donde el Stibys tiene organizados a los trabajadores, este flagelo está acabando con la estabilidad laboral, fomentando la tercerización de actividades.
Las plantas de producción utilizan trabajadores por hora y tercerizados para labores que según las leyes vigentes deber ser realizadas por trabajadores permanentes y con contrato indefinido.
El empleo por hora genera además inestabilidad emocional, económica, psíquica y atenta contra el derecho universal de la libre asociación.
¿Qué trabajador o trabajadora se va a organizar en sindicatos si trabaja 4, 5 o menos horas diarias?
¿Qué trabajador o trabajadora se va a dignificar como ser humano si vive en condiciones permanentes de inestabilidad porque no sabe si trabajará algunos días, toda la semana o todo el mes?
Ni siquiera tienen acceso a un crédito para adquirir una casa, porque el empresario no les da constancia de un trabajo fijo.
Carecen de todos los derechos sociales (aguinaldos, vacaciones, etcétera) porque les dicen que esos derechos van incluidos en el salario que devengan por hora.
Son solo algunas de las tantas arbitrariedades que hay en ese mal llamado empleo por hora, una ley nociva que debe ser derogada por el nuevo gobierno.