Este 31 de julio, Sur Agrícola de Honduras S.A. (Suragroh), empresa melonera subsidiaria de la transnacional Fyffes/Sumitomo en el país, despidió sorpresivamente a José Alexander Sánchez, secretario general de la subseccional del Sindicato de Trabajadores de la Agroindustria y Similares (STAS).
Giorgio Trucchi
1 | 8 | 2023
Foto: Gerardo Iglesias
La empresa aduce que la decisión de dar por terminado el contrato individual de trabajo responde a la implementación de un sistema automatizado para las actividades en las que se desempeña Sánchez.Para el STAS, la medida tomada por Suragroh no es más que una represalia antisindical por las denuncias que el dirigente ha hecho sobre la difícil situación que viven miles de trabajadores y trabajadoras.
Hace dos semanas, con un video1, Sánchez y otros dirigentes del STAS habían denunciado la grave violación de derechos laborales y la represión antisindical en las plantaciones de melones de Fyffes/Sumitomo, en el sur de Honduras.
“Esto obedece a una decisión represiva y discriminatoria de la empresa. No voy a aceptar ningún pago de prestaciones e indemnizaciones. Voy a defender mis derechos ante las instancias correspondientes”, dijo Sánchez al recibir la carta de despido.
Alexander Sánchez fue vicepresidente del sindicato pro patronal creado por Suragroh para contrarrestar el intento del STAS de conformar una subseccional, que defendiera los intereses de las y los trabajadores.
Ante la inoperancia e inutilidad de una organización sometida a los intereses de la transnacional frutera, Sánchez decidió afiliarse al STAS, algo que la empresa nunca le perdonó.
El STAS tiene ahora temor que el despido de Sánchez abra paso a una nueva arremetida contra sus afiliados.
“Despidiendo al secretario general de nuestra seccional, la empresa quiere también mandar un mensaje amenazante al sindicato y al resto de trabajadores permanentes, para que se detenga el proceso de afiliación”, explicó Tomás Membreño, presidente del STAS.
“No podemos quedarnos callados. Alertamos a la UITA y a todas las organizaciones amigas para que estén atentas a lo que pueda pasar en los próximos días. También aguardamos que el Grupo Profesional de Trabajadores de la Agricultura (GPTA) de nuestra Internacional se manifieste de forma contundente ante esta nueva provocación”, concluyó.
Por esta misma actitud antisindical, la Iniciativa de Comercio Ético (ETI) suspendió la membresía de Fyffes, al tiempo que Comercio Justo Estados Unidos (Fair Trade USA) la descertificó.
El caso de Fyffes es también uno de los más emblemáticos en la queja laboral contra Honduras por la violación del capítulo XVI del RD-CAFTA (Tratado de Libre Comercio entre República Dominicana, Centroamérica y Estados Unidos).
