El gremio organizó al respecto un encuentro en el Centro Cívico de Málaga con camareras de pisos, delegadas de personal y de prevención de riesgos laborales para analizar y debatir la problemática.

Cerca de un centenar de personas asistieron al evento, en su gran mayoría mujeres de Hostelería del sindicato, donde la responsable sindical de Hostería Málaga, María Luisa Expósico señaló que la situación de las camareras de piso, se agravó tras la pandemia de Covid-19.

“Las plantillas se ven forzadas a realizar sus trabajos con mucha prisa, tanto en las cocinas y restaurantes como a la hora de la realización de la limpieza y acondicionamiento de las habitaciones del hotel”, dijo.

Según el Sindicato, esos sobreesfuerzos no han sido evaluados de acuerdo con los artículos 15 y 16 de la Ley 31/1995, y provocan un empeoramiento de las condiciones laborales y de salud del personal afectado.

La precarización de las labores con su sobre carga física y emocional, conlleva también un aumento del consumo de medicamentos (analgésicos, antiinflamatorios, hipnosedantes) para poder finalizar la jornada laboral.

El Sindicato ha reclamado a la patronal que evalúe los riesgos que suponen las cargas de trabajo de este colectivo y que se tomen las medidas preventivas oportunas.

También reclamó la realización de estudios rigurosos de los tiempos en el reparto de habitaciones asignadas, teniendo en cuenta que lo prioritario es la salud de estas mujeres.

Desde el Sindicato se insiste en la importancia de una acción preventiva de parte de las empresas para prevenir riesgos laborales identificados, incluyendo una política de compras en los establecimientos (camas móviles y elevables, material ergonómico, productos de uso para la limpieza no tóxicos, etc.).

La organización del trabajo, apunta Comisiones Obreras, debe contar con la participación de las personas afectadas, así como del comité de empresa y del comité de salud laboral.

El Sindicato, que solicitó por otra parte una reunión con la Inspección del Trabajo de Málaga, recuerda que el de las camareras de piso es un colectivo totalmente feminizado y basado en una división sexista, aunque invisible, del trabajo.

“Identificar y corregir los riesgos físicos y psicosociales, avanzar en las políticas de igualdad, salariales y condiciones de trabajo y empleo, son retos con los que CCOO se siente completamente comprometida”, subrayó.