El pasado 30 de octubre, la Rel UITA lanzó un grito de alerta por el uso indiscriminado de avionetas para la fumigación de las plantaciones de bananos, mientras los trabajadores desempeñaban sus tareas. Una semana después, Chiquita Brands Costa Rica SRL volvió a mostrar su desprecio por la
dignidad humana.
Giorgio Trucchi
11 | 11 | 2024
Foto: Gerardo Iglesias
El comportamiento irresponsable de la transnacional bananera en la finca Superamigos, en Sixaola, fronterizo con Panamá, operada por la subsidiaria de Chiquita Brands Int., fue denunciado nacional e internacionalmente por la Fentragh, la UAS y la misma Rel UITA1.
Además de publicar los videos tomados durante tres días por trabajadores de la finca Superamigos, las organizaciones sindicales pidieron la intervención inmediata de las autoridades del trabajo.
“Solicitamos que interpongan las acciones pertinentes para erradicar el envenenamiento que están sufriendo las personas trabajadoras, las cuales son claras víctimas de los actos violentos por parte de la transnacional, al rociarles agrotóxicos sobre sus cuerpos y alimentos”, denunciaron.
Aparentemente sin importarle las consecuencias, el 4 de noviembre pasado, Chiquita Brands Costa Rica volvió a fumigar con sus avionetas mientras los trabajadores realizaban labores de chapea.
Uno de los trabajadores afectados, Eddin Rodríguez López, ya había enfrentado en el pasado esta misma grave situación y había expuesto la problemática durante la inspección laboral realizada por las autoridades el 30 de octubre de este año.
“La conducta de la transnacional evidencia la irresponsabilidad con que viene operando el proceso de aplicaciones aéreas, afectando gravemente a los trabajadores”, señala Maikol Hernández, secretario general de la Fentragh.
“Una vez más ─concluye Hernández─ la empresa se muestra omisa y totalmente despreocupada frente a las medidas legales que deberá enfrentar por rociar de veneno permanentemente a los trabajadores”.