“Descubrimos que las mismas problemáticas que vivimos en el sector de la palma africana las viven también los compañeros y compañeras que trabajan en otros rubros, como el banano y la piña.

Esto nos lleva a entender la importancia de sumar fuerzas, dibujar estrategias, organizar actividades y trabajar unidos para enfrentar y resolver todos estos problemas”, dijo a La Rel Dania Obando, secretaria general del Sitrapa.

“Han sido dos días de retroalimentación muy rica y ahora nos toca avanzar con el plan de trabajo, involucrando tanto a nuestras bases en los territorios como a otros sectores de la sociedad”, agregó.

Para Dania Obando, la articulación con organizaciones a nivel nacional e internacional es imprescindible.

“Es muy importante el respaldo que siempre nos brindan la Fentragh y la Rel UITA, así como las contribuciones en la logística de parte del SINAE y ANDE.

Para Sitrapa y demás sindicatos que participaron al evento (Sinatraa y Sintrapybcr), este soporte se convierte en músculo para podernos enfrentar a estas empresas transnacionales”, concluyó.

Para Gerardo Castillo, asesor de la Rel UITA, varios son los elementos que contribuyeron a que el evento fuera tan exitoso.

“Logramos vincular la teoría con la práctica. Por un lado, los profesores, por el otro la gente que está en el terreno, viviendo y sufriendo a diario las dificultades.

Además, vinculamos lo nacional con lo local, es decir la Fentragh con su visión de distintos sectores y los sindicatos con sus respectivos problemas en las plantaciones”, explicó Castillo.

Un tercer elemento tiene que ver con el haber vinculado el sector privado con el sector público costarricense, dejando abierta una puerta para trabajos y colaboraciones futuras.

“Un cuarto elemento, es la construcción de un puente entre lo nacional y lo global. Sabemos muy bien por la Rel UITA que la situación de violación que se da en Costa Rica con el uso intensivo de agrotóxicos, también se registra en otras latitudes.

Finalmente, es importante remarcar que estos dos días de seminario no se quedaron solamente en discursos y buenos propósitos, sino que se estableció un plan de trabajo y se definieron herramientas para ponerlo en práctica”, concluyó Castillo.