-Se ha incrementado el número de mujeres en Arcor Chile…
-Sí. Tradicionalmente estaban relegadas al trabajo administrativo, en las oficinas, pero desde el año pasado empezaron a contratar mujeres para el área productiva, por ejemplo en las bodegas.
Hay ahora unas 200 mujeres sobre un plantilla total de 1.200 personas en los tres complejos productivos. Eso es nuevo para nosotros.
-Y para la propia organización sindical también…
-Efectivamente. Tenemos todo un desafío respecto a la inserción de las mujeres como tales tanto en la empresa y en el liderazgo sindical.
-Las compañeras que han ingresado, ¿se han vinculado al sindicato?
-Se han sindicalizado sin problemas. Ven en la organización sindical un resguardo, una protección.
-Próximamente los sindicatos de Arcor a nivel regional se encontrarán en Córdoba, Argentina. ¿Cómo ves ese paso?
-Tenemos puntos en común y retos similares.
Va a ser muy valioso que nos reunamos para poder tocar algunos temas puntuales, como el estado de la empresa, y quizás mantener una reunión con la alta gerencia de la compañía.
El respaldo solidario de la Federación Internacional de Sindicatos de Trabajadores de Arcor (Feistar) en todos estos años ha sido muy importante y debemos profundizar la lucha.
-Acaba de comenzar una nueva gestión neoliberal en Chile. ¿Preocupa a los sindicatos?
-Por supuesto. Tenemos que estar expectantes. Debemos ver qué pasa en primer lugar con la reforma laboral que comenzó el gobierno pasado. Creo que lo importante es no perder lo que hemos ganado.
Foto: Gerardo Iglesias