La reciente primera vuelta de las elecciones presidenciales en Argentina ha confirmado una regla de hierro: es un país imprevisible. Allí, en ese territorio de realismo mágico, seguramente está creciendo el próximo Gabriel García Márquez.

La reciente primera vuelta de las elecciones presidenciales en Argentina ha confirmado una regla de hierro: es un país imprevisible. Allí, en ese territorio de realismo mágico, seguramente está creciendo el próximo Gabriel García Márquez.