Nestlé insiste en no cumplir con la decisión de la asamblea de trabajadores, que por votación secreta y amplia mayoría (188 contra 9), aprobó descontar a todas y todos los trabajadores la contribución sindical.
Después de realizada la asamblea, con la clara intención de inviabilizar el Sindicato y de exponer e intimidar a los trabajadores, la transnacional envió un comunicado a todos sus empleados solicitando la formalización de su decisión por escrito hasta el 19 de marzo.
La declaración debía ser presentada en el Departamento de Recursos Humanos de la empresa, en especial por aquellos que votaron a favor del impuesto sindical y del mantenimiento de las actividades del gremio.
La Ley 13.467 / 2017 aprobada por el Congreso Nacional dispone específicamente con relación a la contribución sindical que no obliga a ningún trabajador a expresar su autorización de forma individual.
Por lo tanto, los trabajadores pueden expresarla perfectamente por medio de una asamblea general del sector, como se hizo.
Además, varios dispositivos de la nueva norma han sido denunciados ante la justicia laboral, algunos por inconstitucionalidad, inclusive los que tienen que ver con el mantenimiento o no del impuesto sindical.
Tanto los actos ilegales de no respetar la decisión y soberanía de la asamblea como los de actuar contra la organización sindical, y la actitud intimidatoria contra los trabajadores que apoyan a su gremio, son conductas antisindicales, prohibidas por nuestro ordenamiento jurídico y por la OIT.
Por lo tanto, deben ser rechazadas por todos los trabajadores y trabajadoras y autoridades de Brasil.
El ataque a una organización sindical es una afrenta a todo el sector, pues son los sindicatos los responsables de salvaguardar los derechos constitucionales y laborales conquistados por los trabajadores y trabajadoras, así como de luchar por mejores condiciones laborales y de vida para toda la colectividad que representan.