Secretaria de Comunicación de la CONTAC, Geni es una referencia del movimiento sindical de la alimentación en el plano nacional como internacional.

En los 80 su rol fue protagónico en la construcción de la Comisión de Mujeres de la Federación de Trabajadores de la Alimentación del Estado de Rio Grande do Sul (FTIA/RS), precursora decisiva en la formación del Departamento de la Mujer de la Rel UITA años más tarde.

El Seminario Nacional de Salud y Trabajo en el Sector de la Alimentación de la CONTAC en Chapecó (SC, 25/26.07), fue nuestro lugar de encuentro y motivo de nuestro diálogo.

—¿Cómo evalúas el seminario?
—Fue positivo. Siempre comento que un seminario depende de la capacidad y sensibilidad de los conferencistas, y aquí los tuvimos de un alto nivel que profundizaron temas importantes, propiciaron intercambio de ideas y transmitieron mucha información.

Un tema altamente preocupante, son las frecuentes fugas de amoníaco en los frigoríficos, sus consecuencias para la salud de los trabajadores y trabajadoras. Las exposiciones del farmacéutico Leandro Vargas B. de Carvalho y del Dr. Roberto Ruiz, fueron esclarecedoras sobre esta problemática.

Hace pocos días hubo una fuga en la Cooperativa Aurora en la ciudad de Sarandí (RS), relativamente cerca de aquí, 20 trabajadores y trabajadoras fueron atendidos en el hospital. Hace un año, por recordar una fecha, en la unidad de JBS en Marabá, en Pará, 100 trabajadores fueron intoxicados y esto ocurre, según Leandro Vargas, cada 17 días hay un escape de amoníaco en lo frigoríficos de Brasil. Una barbaridad.

—Generando consecuencias serias para la salud…
—¡Claro! En el seminario participó una compañera que fue víctima de una fuga de amoníaco en un frigorífico y luego de ese accidente, tú la viste, vive cargando una bomba de oxígeno portátil.

Por otro lado, el seminario abordó la problemática consecuencia de la aplicación intensiva de agrotóxicos. Estamos comiendo veneno, esa es la verdad. Hemos llegado al extremo, como mencionaste, donde más de 90 por ciento de los análisis de agua realizados en el país detectaron trazas de residuos agrotóxicos y el porcentaje va en aumento.

Esta situación nos obliga a retomar el trabajo de la CONTAC y la Rel UITA, donde fuimos pioneros. Hoy el veneno está en la mesa, está matando, contaminándolo todo.

Tenemos muchos desafíos, pero quedó claro también en este seminario, que contamos con aliados de primera línea para desarrollar una lucha frontal por la salud, el ambiente y trabajo digno.