-Primera vez en la directiva del Sindicato…
-Sí, es la primera vez que asumo el desafío de formar parte de la directiva, más precisamente del Consejo Fiscal del Sindicato.
-¿De qué rama de la industria vienes?
-Trabajo en un frigorífico avícola llamado Nova Arasa Alimentos, en la ciudad de Nova Arasa, en la Sierra Gaúcha.
-Mencionabas que notas muchos prejuicios en la sociedad y en las organizaciones sindicales. ¿Cómo se manifiestan?
-Es cierto. Yo soy oriundo de un pequeño pueblo en el norteño estado de Pará, es decir que acá soy migrante y además soy negro, entonces puedo afirmar que existen no solo prejuicios sino también discriminación.
-¿Qué tipo de discriminación sufriste?
-La primera fue por ser nordestino, migrante dentro de mi propio país. Los lugareños creen por lo general que vienes a sacarles el trabajo, cuando en realidad los que nos vamos de nuestros lugares de origen es porque no tenemos otra opción para poder sobrevivir y mantener a nuestras familias.
Migramos en busca de trabajo y una vida mejor que la que teníamos porque en Pará no hay trabajo, no hay futuro.
-¿Qué significa para ti formar parte de esta directiva?
-Un gran reto.
Al ser migrante puedo conectar con mis compañeros senegaleses y haitianos que trabajan en la industria frigorífica, ayudarlos desde mi rol de dirigente sindical. Ese es uno de mis propósitos en esta directiva.
-Hay muchas organizaciones que todavía no incorporan a las mujeres, el colectivo LGBT, los migrantes…
-Sin dudas, existe mucho prejuicio dentro de las organizaciones sindicales, la mayoría todavía es muy conservadora y cierran sus espacios a las mujeres, a los LGBT, a los negros, a los indígenas y migrantes. De ahí nuestra debilidad, la falta de inserción en la sociedad.
Pero creo que ha llegado el momento en Brasil de unirnos como clase obrera más allá de la raza, la orientación sexual o el género. Tenemos que entender eso de una buena vez.
-En nombre de la Rel UITA y su equipo mis felicitaciones y éxitos en tu gestión.
-Muchas gracias por ofrecerme este espacio para decir algo que siempre quise expresar y por darnos voz a quienes muchas veces no la tenemos.
En Serafina Corrêa, Gerardo Iglesias