Foto: Difusión“Resulta insultante que el argumento de la mayor empresa láctea del mundo para no ofrecer un reajuste salarial acorde sea que no le dan los números”, declaró a La Rel Wagner Do Nascimento, dirigente del Sindicato de Trabajadores de Carambeí y Región.
Desde 2019, los sindicatos de la empresa en Carambeí no avanzan en las negociaciones y desde 2020 en el resto de Brasil no logran negociar un nuevo convenio colectivo pues Lactalis se niega a negociar de buena fe.
“Los sindicatos respaldados por CNTA, CONTAC y la UITA rechazan firmar acuerdos que no cubran al menos un reajuste por inflación, para evitar una pérdida del salario real, ya que de aumento ni hablar”, dice.
Desde que desembarcó en Brasil, Lactalis, actualmente número uno en el ranquin de empresas lácteas, desplazando a la poderosa Nestlé, mantiene una política de desconocimiento de las organizaciones sindicales y de intransigencia ante los reclamos de sus trabajadores y trabajadoras.
Como un claro ejemplo de esa sordera, la compañía impuso un reajuste que contempla el 80 por ciento de la inflación y ahora busca negociar la participación del personal en los resultados sin haber cerrado la negociación del acuerdo salarial.
“Necesitamos coordinar acciones a nivel internacional que refuercen las que ya estamos tomando en Brasil para presionar a esta empresa que ha obtenido enormes dividendos en los últimos años y que niega a sus trabajadores lo mínimo”, dijo Wagner.
El sindicalista anunció el comienzo de una nueva etapa en la lucha.
“Movilizaremos a los compañeros y las compañeras a nivel nacional, y profundizaremos las denuncias.
En algunos estados nos vamos a valer de las convenciones colectivas que estipulan reajustes por inflación.
Contamos con la UITA para que estas prácticas antiobreras de Lactalis se conozcan en todo el mundo, incluida la matriz en Francia”, subrayó.
