Esta norma promovió una transformación que cambió radicalmente la forma de trabajar, desde el piso de las plantas hasta la producción, todo tuvo que adaptarse.
En las áreas de trabajo, el suelo debe ser plano, debe haber sillas ajustadas al tamaño de los trabajadores y las trabajadoras, reposapiés, plataformas y escalones, barandillas y pasamanos.
El espacio de las esteras en la línea de producción, los cuchillos, las tablas y los guantes protectores deben ser adecuados para cada trabajador. Ya no se permite la torsión del torso o la elevación de los hombros porque eran posturas que causaban muchas lesiones.
A partir de la aplicación de NR36, ya no son los trabajadores los que tienen que adaptarse a la producción, sino la producción la que debe adaptarse a ellos en sus diferencias, estamos tratando la equidad en las líneas de producción.
La NR36 es democracia. Hoy, quejarse de un trabajo es posible.
Las pausas son un punto clave de la norma. En la jornada laboral, tener ese momento para salir de los ritmos agotadores, respirar aire puro, calentarse las manos, socializar con los compañeros es un momento precioso y único.
La NR 36 es feminista. Los frigoríficos avícolas emplean mayoritariamente a mujeres, por lo que los beneficios de la NR36 llegan a un gran grupo de trabajadoras que tienen doble o hasta triple jornada.
También les permitió ejercer sus actividades en el trabajo con mayor comodidad. Poder ir al baño cuando sea necesario parece una tontería, pero ese derecho ha mejorado la vida de todos, especialmente de las mujeres durante su período menstrual.
La NR36 es vida y seguridad. Hoy las empresas tienen que contar con un sistema de control de fugas de amoniaco, un sistema de renovación de aire, protección de cables de motor, entre otras medidas de seguridad laborales.
La NR36 es derechos humanos. En la historia del trabajo, de la industrialización, nunca se pensó y aplicó un proyecto tan ambicioso como esta norma para mejorar y disminuir los impactos de las enfermedades ocupacionales, para reducir la depresión entre los trabajadores de una industria con una alta tasa de esta patología.
No hay forma de pensar el trabajo en frigoríficos sin la NR36. Existen vidas humanas detrás del producto final que todos consumen.
La NR36 trajo la humanización de las líneas de producción. ¡Así que, si cambia, tendrá que ser para mejorar!