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Con Artur Bueno de Camargo

Con Lactalis la lucha es desigual

Artur Bueno de Camargo, presidente de la CNTA, actualiza en esta entrevista el estado del conflicto entre las organizaciones sindicales que representan a trabajadores y trabajadoras de Lactalis de Brasil y la transnacional.

Amalia Antúnez

28 | 03 | 2022


Artur Bueno de Camargo | Foto: Gerardo Iglesias

-¿Cómo sigue la negociación colectiva con Lactalis?
-La empresa francesa impuso el año pasado durante la negociación colectiva un reajuste salarial que no contemplaba la totalidad de la inflación, alegando no tener condiciones financieras para hacerlo.

Algo como mínimo inverosímil teniendo en cuenta el crecimiento exponencial de la compañía, que es actualmente número uno en el mundo en el sector lácteos.

-La situación se ha extendido bastante…
-Para que tengan una idea, hay algunos sindicatos que no han logrado firmar acuerdos en al menos dos años.

Y debido a la reforma laboral de 2017 están en clara desventaja, porque la legislación permite que cuando los sindicatos no aceptan una propuesta de la empresa esta puede nombrar una comisión negociadora de los trabajadores, dejando de lado a los representantes sindicales.

-¿Cuál es el peligro de esto?
-La presión que sufren los trabajadores y las trabajadoras puede llevarlos a aprobar algo que claramente sea desventajoso para ellos.

Todas las resoluciones que tomamos en la última reunión nacional del grupo Lactalis el pasado viernes 25 están dirigidas a impedir que la transnacional llegue a esa instancia, pues allí la lucha será totalmente desigual.

Dar batalla

La reforma laboral y la coyuntura social y económica resultante de la pandemia debilitaron la presencia sindical. Hasta ahora no podemos realizar asambleas con todos los trabajadores y trabajadoras.

A esto hay que sumar una sistemática política antisindical de Lactalis, que realiza campañas de desprestigio de las organizaciones gremiales y busca negociar con cada sindicato por separado, con el objetivo de debilitarlos aún más.

Es una lucha desigual, pero vamos a dar batalla hasta lo último.