“En una nueva etapa de esta operación de la policía federal se detectó la presencia de salmonella en 4 unidades de BRF, lo que provocó que se suspendieran algunas exportaciones de la empresa”, informó Artur Bueno Junior, vicepresidente de CNTA.
Como primera medida, la CNTA y la CONTAC resolvieron solicitar una reunión con la gerencia de BRF para esta semana.
“Decidimos emplazar a la empresa a que nos reciba antes del miércoles 28 para discutir sobre cuáles son sus planes para paliar los efectos nocivos que esta conducta empresarial está causando a los trabajadores y trabajadoras del grupo”.
BRF propietaria de las marcas Sadia, Qualy y Perdigão, es la mayor procesadora avícola del planeta y sus productos se comercializan en más de 150 países.
Bueno Junior coincide con el presidente CONTAC, Siderlei de Oliveira, en que el director ejecutivo de BRF, Abilio Diniz debe dimitir lo antes posible.
“Está comprobado que este señor no está capacitado para dirigir una empresa como BRF. Una de nuestras principales exigencias es que sea retirado del comando del grupo.
Diniz además hace caso omiso de los representantes de los trabajadores y trabajadoras y esa actitud es inaceptable”, manifestó.
Entre otras medidas, Junior adelantó que ambas confederaciones van a trabajar en conjunto con el Ministerio Público Federal para dar seguimiento a esta trama y exigir que, además de suspender exportaciones y multar a la compañía, se contemplen los puestos de trabajo que están en riesgo con la política irresponsable llevada adelante por BRF.
“Este miércoles 28 volveremos a reunirnos con la CONTAC para dar seguimiento a las medidas conjuntas que estamos realizando a nivel nacional y para evaluar la respuesta de BRF si es que la hay”, concluyó.