El 2017 fue recibido por los trabajadores de la empresa San Miguel Industrias PET con el convencimiento que los primeros días serían de lucha.
Tras varias semanas de negociación infructuosa, la empresa se negó a dar solución a sus demandas, a participar en las reuniones de trato directo y de conciliación.
“Desde el 4 de enero estamos en huelga indefinida, exigiendo la solución a nuestro pliego de reclamos, que la empresa se niega a atender”, denunció a La Rel Carlos Enrique Velarde, secretario general del SINTRASMIP.
El dirigente sindical informó que están demandando un incremento de la remuneración de la jornada laboral, del bono escolar y el respeto de la jornada de 8 horas diarias.
“Actualmente trabajamos 8 horas y 25 minutos. Hemos logrado que se rebaje 20 minutos, fue una lucha larga pero lo logramos. El respaldo que hemos tenido de la Rel UITA ha sido fundamental”, señaló.
Este es el tercer pliego que el SINTRASMIP presenta ante la empresa, la cual viene aplazando la solución a las demandas y está sustituyendo a los trabajadores en huelga por otros ajenos a la compañía, violando así el Reglamento de la Ley General de Inspección del Trabajo.
“Hemos solicitado al Ministerio de Trabajo una inspección en la planta porque ilegalmente la empresa está colocando personal en nuestros puestos de trabajo. Buscan quebrantar la huelga, les llevan comida y refrigerios para que trabajen más horas y que la producción no se vea afectada. Como estamos en verano hay más demanda”, explicó.
La actividad de San Miguel Industrias Pet se centra en la producción y venta de envases destinados a bebidas gaseosas, aguas, isotónicos, aceites comestibles, para el mercado nacional e internacional.
Es la primera empresa peruana en operar una planta de transformación de botellas a nuevas botellas con capacidad para procesar 1.200 toneladas al mes.