Las irregularidades fueron constatadas en todas las plantas de Arcor y tienen que ver con el no respeto del distanciamiento social en las instalaciones, la escasa reposición de elementos como barbijos y alcohol en gel, el mal estado de los baños.
En una de las plantas, en la provincia de Córdoba, la empresa no garantiza el transporte de sus trabajadores, que deben asumir riesgos y costos adicionales.
“Estos incumplimientos generan un ambiente de tensión y angustia en las fábricas, lo que dificulta a los trabajadores seguir acatando los términos de la conciliación obligatoria” decidida por la justicia, establece un escrito elevado por la FTIA al Ministerio de Trabajo el lunes 18.
Arcor ya había sido denunciada anteriormente por el sindicato por estos y otros incumplimientos y la empresa había hecho oídos sordos a los reclamos, así como a la resolución de conciliación obligatoria.
La FTIA pide nuevamente al Ministerio que se intime a la empresa a respetar lo acordado.