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Entre esos temas destacó que el Ejecutivo no acepta volver a otorgar a los pescadores industriales el derecho a operar a partir de las cinco millas, en vez de las diez, como es el caso actualmente.
“Les ha reservado ese derecho a los artesanales, que tienen embarcaciones de menor porte, pero los artesanales jamás han pescado anchoveta, y nosotros vivimos de eso en esta temporada”, dijo.
La ausencia de peces se debe a las altas temperaturas de las aguas a raíz de la corriente de El Niño. “La anchoveta necesita de una temperatura de 16 grados, y las aguas están a 19”, señaló Pedemonte.
“Al no haber pescado nos sentimos prácticamente sin ingresos y no podemos siquiera hacer los aportes mínimos que se nos exige para tener cobertura de salud. No es que nos neguemos a trabajar nosotros o las empresas, es que no hay pescado, simplemente”, indicó.
Desde el mes pasado, el gobierno aceptó liberar compensaciones por tiempo de servicio, una medida que ha aliviado en algo la crisis, pero sigue siendo insuficiente, alertó el dirigente del SUPNEP:
“Si nos dejara volver a pescar donde históricamente lo hemos hecho la cosa podría cambiar, pero no nos ha hecho caso”, se quejó.
Tiempo atrás Pedemonte había declarado a La Rel que la más grave de la prohibición de pescar a partir de las cinco millas es que “se les está dando la oportunidad a malos empresarios para lucrar”.
“Han convencido a pescadores artesanales y a propietarios de embarcaciones de mediana escala para que desvíen su pesca de anchoveta -que principalmente es para el consumo humano- a la producción de harina de pescado”.
“Para los artesanales es más rentable vender la anchoveta para harina de pescado porque el precio es mayor, y no tienen que preocuparse en traer el pescado debidamente refrigerado y acondicionado”, señaló entonces.
En Perú hay alrededor de 15.000 pescadores industriales, de los cuales unos 2.400 están agrupados en el SUPNEP.