El resultado de este esfuerzo colectivo se conoce casi que exclusivamente por aquellos quienes han vivenciado o fueron testigos de verdaderas batallas libradas durante decenas de reuniones que culminaron en la redacción del texto aprobado por consenso entre trabajadores, empleadores y gobierno.

En este contexto, uno de los más prominentes actores sociales fue sin duda la CONTAC.

Ahora que la NR 36 está en vigor, se hace necesario que la confederación y todas las  entidades sindicales del sector de la alimentación actúen de forma efectiva con vistas a la implementación de su texto, y más que eso, que se logre un grado de estandarización del trabajo decente en todos los frigoríficos.

En coherencia con la NR 36, ya no es posible firmar acuerdos o convenciones donde se acepte el banco de horas en los frigoríficos.

Mucho menos premios, presentismo o  productividad que inexorablemente colaboran con el aumento en los índices de enfermedades derivadas del cansancio, del estímulo a la producción con el uso de horas extras en ritmo exhaustivo y, por veces, en condiciones insalubres.

Este primer paso debe ser visto como el punto innegociable para los sindicatos que realmente se preocupan por la salud de sus empleados que son trabajadores en los frigoríficos.

Los demás pasos que deben ser dados pasan por la calificación, incluyendo el cuerpo jurídico, para actuar en defensa de la categoría a partir de las inúmeras  posibilidades que se abren con la NR 36.

Para ello, es sabido que la CONTAC aún tiene mucho que ofrecer a sus entidades de base.

¡La lucha continúa!