Al igual que otras compañías productoras de alimentos, Nestlé no ha podido escapar a la crisis europea y a la disminución del crecimiento en algunos países periféricos. Pese a haber practicado una rebaja de precios en Europa, sus pronósticos para el primer semestre no se cumplieron; de un crecimiento del beneficio neto estimado entre el 5 y el 6 por ciento, el incremento alcanzado fue de 3,7 por ciento. De todas formas, Nestlé ganó en el semestre 5.100 millones de francos suizos (4.143 millones de euros).

 

Por su parte, las ventas alcanzaron los 45.000 millones de francos suizos (36.700 millones de euros), una mejora del 5,3 por ciento. En comparación con el incremento de las ventas de sus competidores estas cifras tampoco son buenas, desde el momento en que Danone obtuvo un incremento del 6,5 por ciento en sus ventas trimestrales y 5 por ciento Unilever en el mismo período.

 

Paul Bulcke, consejero delegado de Nestlé, pronosticó que la compañía alcanzará un crecimiento cercano al 5 por ciento, frente a las previsiones anteriores que oscilaban entre el 5 y el 6 por ciento. “Hemos tenido un desempeño equilibrado en el primer semestre, tanto en términos de ventas como de beneficio, en un entorno en el que el crecimiento es menor y de reducción de costes de materias primas”, señaló.

 

Por su parte la filipina estadounidense Wan Ling Martello, que proveniente de Waltmart asumió la presidencia financiera de Nestlé en abril del año pasado -constituyéndose en la primera mujer en integrar los cuadros directivos de la compañía en Vevey donde predominan los hombres maduros de traje oscuro- declaró en una teleconferencia que las nuevas orientaciones serán más complicadas: “Soy bastante nueva en la organización (…) algunos de mis colegas son optimistas de poder llegar a ese número, pero no va a ser fácil”, afirmó.

 

La cadena hotelera española cerró 2012 con un beneficio de 37,3 millones de euros, un 7 por ciento menos que en 2011. Para su presidente, Gabriel Escarrer Juliá, 2012 fue “un ejercicio enormemente complicado para la compañía”, la cual gracias a su presencia internacional -se encuentra presente en 39 países- pudo disimular los efectos de la crisis.

El 84 por ciento de su beneficio operativo se generó fuera de España. La compañía, que incorporó un hotel aproximadamente cada tres semanas, ritmo que espera mantener durante 2013. La expansión se centrará en América Latina y el Caribe, aunque también ha intensificado su crecimiento en la región de Asia-Pacífico (China, Indonesia y Vietnam).

 

Con respecto a primer semestre de 2013, Meliá Hotels Internacional lo cerró con un beneficio neto de 12,1 millones de euros, un 14,4 por ciento más sobre el mismo periodo del ejercicio anterior.