Desde ayer jueves 6 de agosto se hizo efectiva la huelga de los sindicatos de Graneros y Los Ángeles.
La transnacional en Chile sigue en su intransigencia de tener a trabajadores de primera, segunda y tercera clase, cuando todos pertenecemos a la misma empresa Nestlé, no importando en qué lugar del país estén ubicadas sus unidades de producción.
Preocupa que en los procesos de negociación la compañía se niegue a compartir utilidades con sus trabajadores y trabajadoras, en impulsar la quita de beneficios, en recortar el convenio.
Estos mismos trabajadores y trabajadoras que en medio de la pandemia tenaz que sacude a Chile, continúan al frente de sus labores porque la compañía no ha parado de producir.
Nestlé no comparte ganancias y además no toma conciencia que, de este momento tan delicado se saldrá impulsando más diálogo, respeto y tolerancia y no con intransigencia.
En Santiago, Jorge De La Fuente C.