DERECHOS HUMANOS

“Ayúdenos a defender nuestra tierra”

Jóvenes indígenas de Tocantins entregan carta al Papa Francisco

“Ayúdenos a defender nuestra tierra”
Jóvenes indígenas de Tocantins entregan carta al Papa Francisco
 
A Su Santidad el Papa Francisco:
 
Nosotros, los líderes indígenas del estado de Tocantins estamos muy felices de que usted esté aquí en la Jornada Mundial de la Juventud – JMJ. Confiamos en que su visita traerá la luz y la esperanza para Brasil en esta actual coyuntura.
 
En nombre del conjunto de los 305 pueblos indígenas de Brasil oficialmente reconocidos, y también de los pueblos libres que están todavía en el bosque, los jóvenes indígenas de Tocantins venimos a la JMJ a saludarlo con respeto, admiración y afecto.
 
Sabemos que usted es el líder mayor de la Iglesia Católica, nos enteramos de todo el proceso de su elección y creemos que Dios lo llamó a una tarea importante, especialmente hacia los pobres y excluidos. No es de extrañar que usted haya elegido llamarse «Francisco», el hermano de los pobres y de la naturaleza.
 
Motivados y animados por esta simplicidad y por su compromiso con los pobres y excluidos, venimos hasta usted para pedirle que interceda por los pueblos indígenas ante el gobierno brasileño. Su Santidad ya debe conocer la situación que se vive en Brasil, sobre todo por los acontecimientos de los dos últimos meses, como resultado de las políticas gubernamentales que sólo sirven al gran capital y a las grandes empresas, olvidando lo esencial: la vida, la justicia y la dignidad de la población.
 
Pedimos a Vuestra Santidad, como líder mayor, que intervenga ante el gobierno de Brasil para que detenga la violencia y los ataques practicados contra nuestro pueblo. Los pueblos indígenas sólo existimos en la Tierra, que es nuestra Madre, junto al río, que es nuestro Padre. Siempre hemos vivido en armonía con la naturaleza, sin tierra somos como un árbol sin raíces.
 
Por lo tanto, venimos a pedirle que interceda urgentemente ante el gobierno de la presidenta Dilma Rousseff para detener la masacre de los nuestros, especialmente los indígenas guaraní-kaiowá de Mato Grosso do Sul, que sufren por haber sido expulsados de sus tierras, actualmente en manos de los terratenientes. Ellos matan, criminalizan y acusan de bandidos e invasores a los pueblos indígenas. Este es el caso del pueblo Terena, en el estado de Mato Groso del Sur, y del pueblo Mundurukú, en el estado de Pará, así como de otros pueblos que han visto a sus líderes ser asesinados cobardemente por defender sus tierras.
 
Todos los conflictos se dan por el derecho a la tierra. Y este conflicto es provocado y alentado por el gobierno de Brasil, con su política antiindígena que prioriza la explotación y el robo de nuestras tierras, convirtiéndolas en una mercancía. Por lo tanto, nuestras tierras son codiciadas por las grandes empresas, que quieren explotar sin piedad las riquezas de nuestros bosques. Estas tierras son sagradas, pues son un don que Dios ha dado a nuestros antepasados. No vamos a permitir que ningún gobierno ni empresa quite lo que es nuestro: la Tierra.
 
Nuestros territorios son constantemente amenazados por grandes proyectos, como carreteras, represas hidroeléctricas, hidrovías, ferrocarriles y el agronegocio. Estos proyectos son proyectos de muerte para nuestra Madre Tierra y para nosotros, los pueblos indígenas. Por lo tanto venimos a pedir a usted, amigo y defensor de los pobres, intervenir ante el gobierno brasileño para detener todos estos proyectos genocidas, que son la Ordenanza 303 de la AGU, las Propuestas de Enmienda Constitucional (PEC) 038, 215 y 237, así como el Proyecto de Ley (PL) 1610 sobre minería.
 
Todas son propuestas para reducir, manipular y destruir los derechos indígenas, garantizados por la Constitución Federal de 1988, y dejan las tierras indígenas a merced de la explotación desenfrenada, que sólo quiere destruir y matar, sin respetar nuestra cultura, tradición y espiritualidad.
 
Pida al gobierno de Brasil que también cuide con cariño y atención de los pueblos indígenas, especialmente en lo que refiere a la salud, ya que muchos de nuestros niños, jóvenes y ancianos han muerto por falta de cuidados básicos. Le pedimos que interceda por nosotros para que el gobierno escuche el clamor de los pueblos indígenas, dialogue y respete nuestras decisiones sobre nuestros territorios; que respete el Convenio 169 de la OIT, y acepte la consulta libre, previa e informada.
 
Sólo queremos nuestra tierra, vivir en paz y criar a nuestros hijos y nietos en la tierra que Dios nos dio. Queremos nuestros cultivos, pescar, cantar y bailar, hacer nuestros rituales y vivir tranquilos, es solo eso lo que queremos, o sea, nuestro Bienestar, lo que significa vivir bien con la naturaleza y con la gente. No queremos que nuestros jóvenes se sigan suicidando por no poder acceder a una tierra sin la cual no tienen nada que ofrecer a sus hijos.
 
Queremos decirle que agradecemos la solidaridad de la Iglesia Católica de Brasil con nuestra lucha y por su defensa de nuestros derechos y su compromiso con la causa indígena.
 
Papa Francisco, le agradecemos por no haber desistido de venir a Brasil en este momento difícil, por no tener miedo de estar junto a los pobres, señal de que -para nosotros-usted también está con los pueblos indígenas, ribeirinhos, quilombolas, campesinos y excluidos de la sociedad. Esperamos que usted nos defienda de los grandes y poderosos.
 
Por último, lo invitamos a visitar un día nuestro pueblo y que vea la riqueza de nuestra cultura y la fuerza de nuestra espiritualidad, así como la belleza de la Madre Tierra.
 
Que Dios lo ayude a defender la vida de los más desprotegidos y que nos ayude a todos a construir la Tierra sin Mal.
 
Atentamente,
 
Jóvenes indígenas de Tocantins – Brasil
 
cimi 20130806-610
Foto: CIMI 
Traducción: Rel-UITA