Ilustración: Allan McDonald | Rel UITA
Hoy se cumplen dos años de la lucha de los trabajadores de Cargill en Turquía que fueron despedidos por formar un sindicato.
La transnacional que nos iba a salvar del hambre con sus semillas modificadas genéticamente y hace tanto alarde de su responsabilidad social, demuestra su verdadero rostro y su política corporativa que violenta derechos humanos.