El pasado 30 de septiembre, el dirigente sindical recibió una carta notarial en la que Backus AB InBev (1) lo acusa de “incumplimiento de las obligaciones de trabajo”, “inobservancia del reglamento interno” y “actos de injuria en agravio del empleador”.
Además, lo informa que “a partir de la fecha y durante todo el procedimiento de despido”, lo exoneran de su obligación de asistir a sus labores.
No es primera vez que Gayoso Vela recibe una carta notarial, ni que la transnacional cervecera amenaza y arremete contra los trabajadores.
En abril del año pasado, Backus AB Inbev retuvo contra su voluntad a todo el personal de los centros de distribuciones a nivel nacional, coaccionándolos a firmar su renuncia inmediata.
Unos meses antes, la tercerización del servicio de televenta ocasionó el despido de unos 400 trabajadores. Cerca de 500 más fueron cesados del área administrativa.
El objetivo de Anheuser-Busch Inbev (AB Inbev) sigue siendo tercerizar y reducir costos, recortando personal y fusionando plantas, para recuperar rápidamente lo invertido en la compra de la compañía cervecera peruana.
De acuerdo con las organizaciones sindicales de Backus AB Inbev, en menos de tres años son más de 1.200 los trabajadores que han perdido el empleo. Y la ofensiva no ha terminado.
“La empresa ha mantenido una actitud intimidatoria y ha venido obligando a los trabajadores a desempeñar más cargos y funciones, pero devengando el mismo salario.
Cuando alguien se niega, la empresa lo sanciona aduciendo que está incumpliendo las obligaciones de trabajo. A varios hasta les han mandado cartas de preaviso de despido”, explicó Gayoso a La Rel.
“También tenemos serios problemas para avanzar con la negociación colectiva. Backus AB Inbev se ha dedicado a dilatar el proceso, obligándonos a dar por terminada la plática directa y solicitar la mediación de las autoridades del trabajo.
Todo esto lo he estado denunciando en los medios y redes sociales. Es por eso que la empresa pretende coartar mi derecho a ejercer la defensa pública de los intereses y derechos de las y los trabajadores”, agregó Gayoso.
No es casualidad que la primera carta notarial la recibiera el 20 de agosto, día en que se estaba intentando instalar la mesa de negociación.
“Contesté a todas las acusaciones y luego me presenté a la que llaman ‘audiencia de investigación y diálogo’, sin embargo la empresa dijo que no pude sustentar mis descargos.
Además de ocupar el cargo de secretario general -continuó Gayoso̶– soy parte de la comisión negociadora e integro la comisión de seguridad y salud en el trabajo.
Con este ataque quieren sentar un precedente, debilitar al sindicato antes de iniciar la negociación colectiva y amedrentar a nuestros afiliados”, manifestó.
El secretario general del Sintraincer aseguró que la compañía belga-brasileña no sólo está violentando la legislación laboral nacional, sino que está haciendo tabla rasa de la Constitución, los tratados internacionales y la jurisprudencia en materia laboral y sindical.
“Espero que Backus AB Inbev desista de esta actitud reprobable. Es inamisible lo que está haciendo”, concluyó Gayoso.
En Managua, Giorgio Trucchi | Rel-UITA
1 Unión de Cervecerías Peruanas Backus y Johnston S.A.A.