Honduras vive quizás la peor crisis de derechos humanos de su historia reciente.
Según el padre Ismael Moreno, director del ERIC1 , en Honduras persisten todas las condiciones para que se reproduzca la historia trágica de las desapariciones forzadas y la impunidad.
Una crisis que está relacionada profundamente con el golpe de Estado y la ruptura de la institucionalidad en el país.
“Durante diez años se ha venido construyendo el golpe, hasta llegar a la etapa actual que es la instalación de un régimen dictatorial. En este contexto la crisis de derechos humanos es absoluta.
Afortunadamente ̶ continuó el padre Melo ̶ hay actores en nuestra sociedad que han jugado un papel importantísimo en la construcción de propuestas para reconstruir la institucionalidad”
Son las y los defensores de derechos humanos, de la tierra y los bienes comunes, los migrantes, las organizaciones feministas y los comunicadores sociales.
“Solamente construyendo un nuevo sujeto social y político podremos salir de este atolladero, recuperando un estado de derecho que ha sido quebrantado por este estado criminal”, advirtió Moreno.
Bertha Oliva, coordinadora del Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (Cofadeh), organización anfitriona del evento y con quien la Rel UITA coordina múltiples labores, dijo que no se puede avanzar en materia de derechos humanos si no se habla de desaparición forzada.
Además no hay que olvidar que la desaparición forzada está íntimamente relacionada a la impunidad.
“Las barbaries que vivimos hoy es el resultado de que el Estado no haya hecho absolutamente nada para combatir la impunidad y exigir justicia colectiva.
No podemos construir futuro sin resolver el pasado. Es necesario -explicó Oliva– continuar a exigir justicia para nuestros 184 desaparecidos. Cofadeh no está dispuesto a olvidar, ni a perdonar.
Vamos a seguir señalando a los actores del terror que nunca fueron alcanzados por la justicia. No vamos a permitir que los asesinos entierren el pasado”, apuntó.
La coordinadora de Cofadeh pidió a los presentes que se instale una mesa permanente “para investigar cada caso de desaparición forzada en Honduras”.
La actividad contó también con las intervenciones de María Soledad Pazo, representante residente de la OACNUDH2, Luciano Hazan, representante del Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Forzadas de Naciones Unidas y Francisco Etxeberria, antropólogo y biólogo forense.
En Tegucigalpa, Giorgio Trucchi
1 Equipo de Reflexión, Investigación y Comunicación
2 Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Honduras