Los patrones de precipitación están cambiando, las temperaturas están aumentando y algunas áreas están experimentando cambios en la frecuencia y severidad de los fenómenos meteorológicos extremos, como las lluvias intensas.
Los impactos van desde el derretimiento de los glaciares andinos hasta devastadoras inundaciones y sequías.
Los dos grandes océanos que rodean el continente, el Pacífico y el Atlántico, se están calentando y acidificando a medida que aumenta el nivel del mar.
Desafortunadamente, se esperan mayores impactos en la región ya que la atmósfera y los océanos siguen cambiando rápidamente. El suministro de alimentos y agua se verá afectado.
Los pueblos y las ciudades, así como la infraestructura necesaria para sostenerlos, estarán cada vez más en riesgo. La salud y el bienestar humano se verán afectados negativamente, así como los ecosistemas naturales.
La siguiente imagen detalla el impacto en las aguas pero el cambio climático incide en otros factores como en el ciclo hidrológico afectando los suministros de agua, provocando la migración forzada; la contaminación del agua y el aumento de personas en situación de estrés hídrico, además de generar la aparición de epidemias como consecuencia de fenómenos climáticos extremos.
Infografía: Noticias Aliadas