El Corporativo Azucarero Emiliano Zapata fue tomado por sus operarios el 17 de marzo pasado, y desde entonces el sindicato sólo pudo mantener un encuentro con las autoridades del ingenio, el día 27.
“No hemos logrado constituir una mesa de diálogo”, señaló Rodríguez.
“El problema es que hay un tercer actor que no se ha sentado a la mesa: los dueños de la tierra donde se siembra la caña. Son ellos los que contratan a los jornaleros, pero pasan su responsabilidad al ingenio”, dijo.
Una de las gremiales que reúne a esos propietarios aceptó reunirse con el sindicato, pero no así la segunda, que se ha cerrado totalmente a una negociación.
“Creemos que el ingenio y el gobierno del Estado deben cumplir su papel”, apuntó el dirigente.
“Siempre hemos dicho que cuando hay violaciones a los derechos humanos y laborales, como sucede en este caso, es porque el gobierno no está haciendo bien su trabajo”.
Rodríguez consideró que las autoridades del estado “terminan siendo cómplices al no realizar adecuadamente sus labores de inspección para hacer valer los derechos mínimos de los trabajadores establecidos en la Ley Federal del Trabajo”.
Fotos: Gilberto García