La violencia en las plantaciones de palma africana
Con Guillermo Rivera
Un nuevo asesinato enluta al movimiento sindical de Colombia
La violencia en las plantaciones de palma africana
Foto: Gerardo Iglesias
El pasado 9 de mayo, el dirigente Tomás Rodríguez Cantillo, que militaba en el comité obrero y negociador de la finca palmera Candelaria y Arrocera propiedad de la empresa Emma Perfecta Lacouture, en la región de Ciénaga, Magdalena, fue asesinado en circunstancias que no han sido esclarecidas aún.
El hecho se da en el marco de la negociación colectiva del pliego de peticiones que lleva adelante el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Industria Agropecuaria (SINTRAINAGRO) y en un contexto de despidos abusivos por parte de la empresa palmicultora que el día anterior al asesinato del dirigente, echó sin previo aviso a un trabajador con 23 años de antigüedad en la compañía.
Guillermo Rivera, presidente nacional de SINTRAINAGRO declaró a La Rel que este hecho enluta a todos los trabajadores colombianos y al movimiento sindical nacional e internacional.
“Si bien recién comienza a investigarse el asesinato del compañero Tomás Rodríguez Cantillo, y no hay todavía evidencias de que el hecho esté vinculado a su actividad sindical, es sabido que aquí en Colombia ser sindicalista es casi una sentencia de muerte”, señaló el dirigente.
SINTRAINAGRO está presionando a las autoridades competentes para que se investigue y castigue a los culpables de este crimen.
“Este un duro golpe no solo para los trabajadores del sector palmero del Magdalena sino para todos los trabajadores agrupados en SINTRAINAGRO.
Haremos todo lo que esté a nuestro alcance para que este crimen no quede impune”, indicó Rivera.