La decisión, que beneficia a todos los empleados de los últimos cinco años, determinóel pago de 18 minutos diarios para los trabajadores del matadero de aves y de 20 minutos diarios para el sector frigorífico de porcinos y chacinados.
El tiempo de cambio de uniforme no era computado como jornada de trabajo, apesar de que el uso de vestimenta adecuada constituye una norma sanitaria obligatoria.
Durante una inspección realizada en el año 2012, el MPT-MG constató que, además de no pagar el tiempo que insume el cambio de uniforme, la unidad de BRF de Uberlândia pasa a retiro a miles de trabajadores por problemas de salud.
Entre los diagnósticos, se encuentran disturbios osteomusculares y dolencias relacionadas a movimientos repetitivos realizados en el frigorífico. Se estima que cerca del 20 por ciento de los empleados padece alguna enfermedad adquirida debido a la precariedad de las condiciones de trabajo en ese sector.
La acción civil pública fue presentada por las procuradoras del Ministerio Público de Trabajo Karol Teixeira de Oliveira y Tatiana Lima Campelo.
La empresa fue demandada por el MPT y deberá adecuar las condiciones laborales en las plantas de Rio Verde (GO) Uberlândia (MG), Chapecó (SC), Toledo (PR), Carambeí (PR), Capinzal (SC), Concórdia(SC), Lucas do Rio Verde (MT), entre otras.
En lo que respecta el tiempo de cambio de uniforme, la empresa ya fue condenada por la Justicia del Trabajo en Santa Catarina (Chapecó y Joaçaba), Goiás (Rio Verde) y Minas Gerais (Uberlândia).
En febrero de este año, BRF fue condenada a pagar 500.000 reales ( 212.000 dólares) por exceso en la jornada laboral de su planta frigorífica en Curitiba. La acción civil pública fue presentada luego que la empresa se rehusara a firmar un término de ajuste de conducta (TAC) con el MPT.
La compañía cuenta con aproximadamente 120.000 empleados en Brasil y sus unidades más grandes se encuentran en Uberlândia (Minas Gerais) y Rio Verde (GO), con ocho mil empleados cada una.
Considerada una de las mayores compañías de procesamiento de alimentos en el mundo, BRF alcanzó una utilidad neta de 466 millones de dólares en 2013.
Según datos aportados por propia compañía, de cada cuatro aves que se consumen en el mundo, una es producida por BRF.