SanCor, empresa emblemática del sector lácteo argentino que supo exportar para 80 países, además de sus 1.500 trabajadores y trabajadoras, representa un importante engranaje económico para muchas localidades del país.

La Rel UITA ha dado amplia cobertura a la crisis que la afecta, así como a las innumerables acciones realizadas por Atilra al más alto nivel con distintas autoridades de gobierno en la búsqueda de soluciones.

La semana pasada Atilra denunció la realización, por la dirección de la empresa SanCor, de operaciones de prensa con acusaciones contra el sindicato.

Una de esas operaciones consistió en mostrar cómo gente ajena a SanCor arroja leche desde un camión cisterna que la compañía “no tiene”.

“Lo que los directivos de la empresa hacen a través de las relaciones incestuosas que mantienen con determinadas/os comunicadores es pretender trasladar la carga de la prueba respecto de sus propias responsabilidades. Esto es: pasar de victimarios a víctimas”, dice el sindicato en un comunicado.

Las trabajadoras y trabajadores de SanCor “han dado sobradas muestras de su buena voluntad y predisposición para ayudar en la coyuntura”.

Pero hace mucho tiempo que el personal no cobra la totalidad de sus sueldos, y la compañía les descuenta dinero de sus salarios que debería ir a la obra social o a jubilaciones destinándolo a otros fines.

Por otro lado, SanCor acusa a los trabajadores y a las trabajadoras de bloquear el funcionamiento de la empresa provocando el desecho de miles de litro de leche.

Desde Atilra se deja en claro que las plantas no están bloqueadas y se anexa en el reciente comunicado: “Bueno es que todos sepan que las y los trabajadores de SanCor seguirán realizando en forma pacífica todas las reuniones que consideren necesarias”.

Y concluye: “lo que pase con la leche será problema, y exclusiva responsabilidad de la patronal.

Estamos dispuestos a industrializar la leche que ellos dicen canallescamente que van a tirar, con la única condición de que sea donada a las entidades que atienden carencias alimenticias de niñas y niños humildes”.