“En lo que respeta al aumento salarial nos han dicho muy claramente que para este año no hay dinero. Dicen que debemos esperar el próximo año, pero se rehúsan a comprometerse formalmente y a dejarlo plasmado en acta”, explicó a La Rel, Marta Anariba, presidenta del Sitraina.

En más de una ocasión, el Sitraina ha manifestado que, durante los últimos doce años, a diferencia de otras dependencias estatales, las y los trabajadores del INA apenas han recibido aumentos en los años 2011 y 2019.

“Queremos llegar a un acuerdo y cerrar la renegociación salarial. Lo ideal sería definir montos y fechas para el próximo año, pero hasta el momento no ha sido posible”, manifestó Anariba.

Pese a las dificultades para avanzar en la negociación, las comisiones lograron consenso en cuanto a adecuar el salario de más de 70 trabajadores y trabajadoras que ni siquiera llegaban a ganar el salario mínimo.

“Con la firma de esta cláusula estamos beneficiando a 72 compañeros y compañeras, que recibirán el salario mínimo establecido para el 2022, retroactivo al mes de enero”, explicó la dirigente sindical.

También se confirmó que, próximamente, iniciará la cancelación de un primer bloque de trabajadores, algunos muy enfermos, que ya sobrepasan la edad de jubilación.

“Sólo se está esperando que la Secretaría de Finanzas realice el desembolso del dinero. Vamos a estar muy atentos para que se cumpla lo que ya acordamos”, aclaró Anariba.

Sitraina y patronal volverán a sentarse a la mesa de negociación el próximo 30 de septiembre.

Mientras tanto, la organización no se quedará de brazos cruzados y continuará movilizándose a nivel nacional, para lo cual están previstas nuevas acciones.

La Rel UITA y el Comité Latinoamericano de Mujeres de la UITA (Clamu) lanzaron una campaña internacional de respaldo al Sitraina, que está movilizando a múltiples organizaciones.

“Aprovecho la ocasión –concluyó la presidenta– para agradecer todas las expresiones de solidaridad y apoyo que nos hicieron llegar desde la Rel UITA y las compañeras del Clamu.

Saber que no estamos solos y que hay compañeros y compañeras que están pendientes de nuestra lucha nos hace más fuerte”.